Esto es algo que sinceramente me preocupa. Muchas veces he cometido el error de compararme con las modelos plus-size y es que chica, por más que intento sentirlas “en mi equipo” se me hace un poco de bola.

No malinterpretemos el concepto: ver chicas plus-size en una pasarela, en campañas de moda, de perfumería e incluso como influencers de éxito me parece un avance increíble. Las mujeres antes éramos constantemente comparadas con preciosas modelos de talla 32 que llevaban décadas sin comer sólido. Estoy segura de que much@s de nosotros estamos aún un poco en shock de todo lo que ha pasado en los últimos años. Personalmente, me hace mucha ilusión pensar que quizás mis hijas crezcan en un mundo en el que existen referentes más allá de la talla 38. Hemos dado un gran paso hacia la diversidad. Que sí, que vale, que no te lo niego. PERO creo que hemos pasado de una comparación concreta a otra.

Si eres una mujer grande ya no se te compara con Kendall Jenner, ahora se te compara con Ashley Graham.

Y me pregunto lo siguiente ¿Se nos está implantando un nuevo patrón, un nuevo estándar de comparación?

Tanto yo como mi mejor amiga tenemos sobrepeso y nuestros cuerpos no tienen nada que ver. ¿Cómo puede ser que una mujer en una talla 48 tenga la misma cara de una que está en la talla 38? ¿Por qué las modelos plus-size que tienen algo de éxito están todas cortadas por el mismo patrón?

•SON PRECIOSAS: tienen una cara que chica… ni la Miranda Kerr. Y lo que más me llama la atención es que a pesar de tener talla grande, ninguna de ellas tiene papada o papos. Vamos, que si sólo les ves la cara no tienes porque intuir su talla de pantalón – SEÑORES, ESTO NO SUELE PASAR. ¿Estas mujeres que hacen? ¿Spinning con las cejas? ¡No lo entiendo!

•TIENEN TETORRAS: ¿Alguien ha visto a una modelo plus-size con poco pecho? ¡Yo no! Todas y cada una de ellas tienen unas tetas bien gordas y bien puestas. Personalmente me encanta que se visualice el pecho grande porque yo llevo muchos años con una copa E. Pero seamos realistas: O llevas una semana de tu vida con una copa D o no entiendo, porque un pecho grande bien puesto en su sitio aguanta MUY POCO. Tampoco te voy a decir que yo me piso las tetas, pero es que me parece surrealista “Soy gorda, tengo una copa D o E y desafío a la misma gravedad con mis pechotes” Anda no me jodas…

Además me preocupa que el sobrepeso se está relacionando directamente con un pecho grande “Es lo bueno de estar gorda, que tienes tetazas” -¿Y LAS MUJERES GORDAS SIN TETAS?-  Tienen la inconveniencia de la panza y la desventaja de no tener tetorras. ¿Cómo creemos que se sienten?

• UNA FIGURA ESCULTURAL: Esto es algo que a mí me toca la moral. ¿Hay algún secreto del que yo no me haya enterado? ¿Hay una manera de decirle a la crema de cacahuete que no se quede en el michi de la espalda y baje al trasero? PORFAVOR, QUE ALGUÍEN ME CONFIRME ESTO.
Las modelos plus-size que más lo están petando no tienen tripa, son anchas de cadera y tienen tetas grandes. Sólo tienes que ver a Ashley Graham ¡Si es como Eva Mendes después de pegarse dos comilonas! ¿Cómo es esto posible? ¡Necesito respuestas! Ni yo ni ninguna de mis amigas hemos descubierto como coger sólo peso en tetas y culo, si tú lo sabes, por favor, comparte esta información sagrada con el resto de humanos.

Cara de ángel y sin señal alguna de sobrepeso, pómulos y clavículas marcadas. Tetas grandes y bien puestas además de una perfecta figura con cintura y torso estrecho pero culo generoso. ¿Cuántas mujeres gordas has conocido así? ¿Se está estableciendo una imagen de lo que debería ser una mujer gorda que atienda a la realidad generalizada del sobrepeso? YO CREO QUE NO.

En resumen: que yo miro a las modelos plus-size que en teoría nos representan y veo a mujeres bellísimas y que obviamente se merecen estar ahí sin duda alguna. Pero veo a mujeres que nos están imponiendo de alguna manera otro standard. Un standard de belleza especial y único para las gordas y eso no me gusta.

Cuando veo al elenco de modelos plus-size americanas siempre pienso lo mismo “Parece que han reunido a los principales empresarios mundiales y han elegido a las pocas gordas que considerarían follarse

Molaría mucho que empezáramos a abrir más la mente, pero abrirla de verdad. Estamos cansadas de sentir esa presión, de tener que sentirnos culpables por no tener un referente específico o no poder estar a la altura de los referentes.

Trabajar en la diversidad no es tener 5 estándares distintos – Trabajar en la diversidad es entender que todos los cuerpos son diferentes y que todos son igual de válidos y todos merecen el mismo respeto.

Trabajar contra la gordofobia no es establecer un estándar de gorda para que ese estándar sea aceptado y “pase por el aro” – Trabajar contra la gordofobia es crear patrones de conducta nuevos en la sociedad que nos permitan entender que estar gordo no es motivo de discriminación ni de opinión.

¿O me equivoco? ¿Tú qué crees?

M.Arbinaga