Toda mi santa vida he tenido las tetas pequeñas. De hecho, no, miento. Cuando era pequeña fui la primera en desarollar, tenía las tetas más gordas de todo cuarto de primaria. Y de ese tamaño siguen desde entonces.

Mis tetas y yo hemos pasado por todas las fases posibles del amor-odio. Nos hemos querido, nos hemos odiado, nos hemos aceptado y hemos comprendido que vamos  tener que convivir juntas toda la vida y señoras, la mar de bien.

Hubo una época en la que preguntaba a mi madre si ya no me iban a crecer más, si era adoptada -todas las mujeres de mi familia por ambas partes tienen las tetas gordas- y si las operaciones estéticas eran muy caras. Todo ese se acabó en el instante en el que vi que mis amigas de pechos gigantes tenían problemas para meter sus berzas en vestidos, camisetas, bañadores y escotes varios. Ahí empecé a darme cuenta de que las tetas pequeñas, tenían algo bueno.

Ahora ya que me considero del todo adulta, que sé que no me van a crecer nunca y estoy envejeciendo juntos a mis señoras, cada vez le veo más cosas malas a las tetas grandes y más positivas a las pequeñas. No me duele la espalda, puedo usar sujetadores que no sujeten y soy capaz de quitarme a subnormales del camino que solamente buscan un par de pechotes con los que restregarse. Todo ventajas, chica.

Que no quiero yo hacer sentir a nadie de tetas gordas una desgraciada ni nada por el estilo, pero chica, así es la vida.

El caso es que llevo muchos años siendo consciente de que mis tetas no van a crecer a no ser que surja un milagro durante un embarazo o algo así, cosa que espero que no suceda, sinceramente. Pero no ha sido hasta hoy cuando por fin he comprendido el por qué de mis tetas pequeñas, el por qué yo de entre todas las mujeres de mi familia he ido a tener que ser yo la que use la talla más pequeña de sujetador, el por qué yo de pequeña tuve que pasar el trauma de plantearme una operación a pecho abierto.

RESULTA QUE ES PORQUE TENGO EL CORAZÓN GRANDE

Lo he visto en Tiwtter, que le han dado RT las chicas de WLS y por fin lo he entendido todo, por fin todas mis preguntas han tenido respuesta, por fin sé el por qué de mis tetas.

Las amo desde hace mucho tiempo, las he aprendido a amar con toda mi alma, son parte de mi y yo parte de ellas, pero ahora todo tiene más sentido. Son pequeñas para dejar sitio a tantísimo amor. Qué bien todo.

Gracias papás, por hacerme así de buena persona.