Va, deja de ignorarle, que está feo: copia y pega y dile adiós a tu antiguo crush

Te estás viendo con alguien que te gusta mucho. Parece que todo va bien hasta que, de repente, desaparece. Se llama ghosting (la-madre-que-te-parió ya estaba cogido) y seguro que todas lo hemos sufrido alguna vez. Ahora bien, ¿qué pasa cuando la fantasma eres tú, amiga?

Cambiar más de opinión que de bragas está tan permitido como de moda en el ligoteo digital. Un día estás quejándote de que está en línea y no te contesta y al siguiente, le quieres mandar a por pan. Y no pasa nada. No hay nada de malo en que ya no te apetezca volver a ver a esa persona, pero no es a tus amigas a quien se lo tienes que contar. 

Ayer se lo decía a una amiga íntima con las mismas palabras que un día una buena compañera me lo dijo a mí. Hoy te lo digo a ti. El silencio no es forma de romper una relación, aunque solo haya sido un rollete tonto o una cita fallida de Tinder. Y bloquearle en las redes sociales o eliminar su número ya ni te cuento. Ya sabes lo que dicen: “no hagas lo que no te gusta que te hagan”. 

Pero, pero, pero. Ya lo sé. Te sabe mal hacerle daño, así que visto al canto y rezas por que pille la indirecta y deje de hablarte. O peor aún. Entras en un bucle infinito de excusas que no te crees ni tú, cariño. Como la de que has tenido contacto directo con alguien que últimamente tose mucho, ¿eh? Una PCR no sé, pero como vayas a un polígrafo, das mentirosa seguro

¿Por qué?: la película, solo en tu cabeza

Ponte en su piel. Probablemente sabes, como todas, lo mal que se pasa cuando ese gran porqué se instala en tu cabeza con su maleta a rebosar de “y sis”. ¿Por qué ya no me escribe? ¿Y si he hecho algo mal? ¿Tal vez fue algo que dije? ¿Y si le ha pasado algo? Dios mío, ¿estará vivo/a? 

El Peliculón dura tanto como tu imaginación y masoquismo se lo propongan, y tu crush puede hasta acabar en el hospital sin acceso a su teléfono móvil. O sus familiares, todo depende de cómo de dramas seas como guionista. Por eso no te contestaba, claaaro. Como siempre —a no ser que seas Ana Milán— la realidad supera a la ficción y en verdad lo que ocurre es que es un fantasma de mucho cuidado. Boo.  

Bien, pues vivido lo vivido, en tus manos está que esa persona deje de comerse la cabeza preguntándose por qué no contestas y viva una experiencia que a menudo suele ser muy frustrante. Si no lo haces por su paz mental, al menos hazlo por educación. Que hacer bomba de humo siempre es el camino fácil, pero de elegante tiene poquito. 

Y si lo que pasa es que te da pereza escribir el mensaje o no sabes ni por dónde empezar, no te preocupes. Para eso estamos las amigas. Aquí van mis textos de copia y pega para ayudarte a decir adiós a tu antiguo crush como la diva que eres. Están ordenados de menos a más intensidad, según el tipo de contacto que hayáis mantenido. Ni en el Rincón del Vago te lo ponen tan fácil. La cazafantasmas, me llaman.

Si habéis chateado y ya no quieres verle

Hola ____, espero que estés bien. Me sabe fatal haber estado ausente últimamente. Lo he estado pensando y la verdad es que no me apetece que nos veamos. Ha sido guay hablar contigo y eres genial, pero creo que lo mejor es que te sea sincera y no hacerte perder el tiempo. Cuídate mucho y ojalá te vaya todo como te mereces. 

Quedasteis una vez, pero…

Hey ____. He pasado un buen rato hoy. Ojalá no tuviera que decirte esto, pero la verdad es que he vuelto a casa sin ganas de una segunda cita. No he sentido lo que me esperaba y me da rabia porque eres un amor, pero prefiero ser sincera contigo y conmigo. Es lo mejor. Va, no me cojas mucha manía, porfi, y cuídate.  

Varias citas que ni fu ni fa

____, no sé si a ti te pasará lo mismo… noto que esto no funciona. Sabes de sobras lo bien que me lo paso contigo, pero llegados a este punto no siento lo que creo que debería sentir. Lo que menos me gustaría sería marearte o hacerte falsas ilusiones. No te lo mereces. Por eso, estoy segura de que lo mejor es dejar de vernos ahora. Gracias por todo, conocerte ha sido genial.

Habéis compartido algo más

Aquí creo que lo mejor es que pongas un poco de tu parte y personalices el mensaje con anécdotas que solo vosotro/as entendáis y un poco de cariño. No es una persona cualquiera con quien te has visto un par de veces, sino alguien con quien has vivido algo especial y de cierta intensidad, aunque fuera breve. Qué menos que customizar su despedida. Por si te inspira, tengo una amiga que una vez utilizó este. ¿O era yo? Solo Zuckerberg lo sabe. 

Ni te imaginas cómo me está costando escribir este mensaje. Le he dado tantas vueltas, ___. Y todas me llevan a la misma respuesta: no puedo seguir con esto. Dicen que todo pasa por algo y definitivamente tú tenías que ocurrirme en algún momento. Cómo si no iba a saber leer el alfabeto árabe, chapurrear en ukelele o cocinar el mejor humus de Barcelona. Pero ambos sabemos que no es por eso por lo que tú has pasado por mi vida, ¿verdad? Estos meses han sido especiales y pienso guardar todo el aprecio que te has ganado por siempre. Siento despedirme así, tras la pantalla, pero ya lo sabes… Soy una miedica. Sé que lo entenderás. Estoy deseando que llegue el día en el que volvamos a hablar y me digas que tienes tu estrella Michelin. Un beso fuerte (en la mejilla, marrano). 

 

Importante: no se permite la reproducción total o parcial de estos mensajes, ni su transmisión vía WhatsApp, Instagram o por cualquier medio por el que te comuniques con tu crush, si a la primera de cambio vas a volver a escribirle. Ni likes a fotos antiguas, ni respuestas a stories, ni contigo, ni sin ti. No mareemos, chicas, que está feo. 

Vanesa Maillo (@maillonesa)