Hola amiga, eso era mi pánico de día a día, hasta que me di cuenta que no era única. El problema no somos nosotras, «chicas de cadera ancha», el problema es el fabricante de sillas que yo creo que hace las sillas para niños de educación infantil. No te angusties, ¡no estas sola! Mi pánico son las sillas de metal, tanto que me obsesionaba. Antes de quedar con algún amig@ a comer o cenar pedía que me dijesen donde ibamos a ir y buscaba por Google fotos.. O Facebook solo para ver en las terrazas que tipo de mobiliario tenían… Hasta que verbalicé, empecé a decirle a mis amigos que no es que no cogiese.. Es q me regentaba los muslos ese tipo de sillas.. Y directamente mis amigos empezaron simplemente si ibamos a algún sitio así a pedir otro tipo de sillas y me di cuenta que la gente normalizaba, era yo la que tenía ese miedo.. Simplemente, comencé a actuar como ellos… Si iba a algún lado que sabía que me iba a amputar los muslos una silla.. Simplemente cogía otra o ibamos a otro sitio. Lo de la uni.. No te rayes, peso 150 kg que se dice pronto… Y me encajono donde sea.. A malas para darte seguridad a tí misma ve antes, prueba y te darás cuenta que ya es producto de nuestro miedo. No hagas como yo he hecho.. Vive! No te cierres a vivir una experiencia, una cena, una comida… Por una p*** silla!!! De todas formas cada, de las sillas que hablas.. Están hechas a prueba de mi cuerpo Serrano! Así que si esas sillas aguantan mi peso… Aguantan todo! Y si no.. Como me pasó una vez… Te levantas riendote y dices hay que ver.. Un tornillo que estaba pasado! Y la gente ya se relaja y se ríe contigo! Para que no den importancia.. Es importante quitarsela. Un abrazo de esos que calman el alma!!

Hola!! Pues como te han dicho por arriba: no es cuestión de peso, depende de la calidad de la silla.

Yo también he roto 2 y rondaría los 55 como mucho, te das un sustito, unas risas y a correr. Y sin embargo tengo amigos que pasan los 130 y jamás han roto ninguna 🤷🏼‍♀️

Intenta no darle demasiada importancia, porque aunque entiendo que te preocupe, tienes que disfrutar esta etapa al máximo. Y oye, si la rompieses (que no lo creo) échate unas risas y pon una queja de las gordas, que nuestra última preocupación en un lugar público debería ser esa.

¡Un beso!