Llevo unos meses quedando con un chico para follar, quedamos un par de veces a la semana, sin compromiso ni nada y más o menos todo bien.
Al principio me pareció raro que no tuviésemos sexo oral, así que decidí empezar yo a ver si así él se animaba, pero nada más lejos de la realidad.
En este tiempo jamás se ha acercado siquiera, pero si que me lo ha pedido a mí. Como comprenderéis me he hartado de ser la que da más siempre y le pregunté que porque no quería comermelo a mí.
Su respuesta ha sido que siempre le ha dado yuyu el sexo oral, que no le gusta practicarlo. De verdad que es el primer hombre que conozco que me dice esto pero bueno yo lo respeto… pero, he decidido que si el a mi no me lo hace yo a él tampoco.
Hace un par de semanas que no he vuelto a comérsela y ya me ha preguntado que qué me pasa, se lo he explicado y me dice que no es justo, que él no puede evitar que no le guste pero que si a mi no me importa se lo tendría que hacer.
Por un lado lo puedo entender, pero por otro no sé que pensar.
¿Habéis tenido algún caso así? ¿Pensáis que tiene la cara muy dura?