Vengo hablaros de mí, de ti, de ella, de todas… de esa <<chica cualquiera>>, de hecho yo soy una de ellas, que como la gran mayoría hemos vivido situaciones que nos han marcado de alguna manera por ser mujer, por algo tan tan básico como ser mujer.

Esa chica cualquiera, que ha cruzado la calle porque había un grupo de hombres, que más de una vez se ha sentido violentada porque algún chico la ha tocado sin su consentimiento. Que han pensado que es una chica fácil por llevar ropa provocativa, y se toman la libertad de hacer o decir lo que les de la gana, que necesita justificar lo que gasta en casa por miedo a su pareja, que su novio la insulte, le pegue por «x» motivo, si es que hay un motivo para pegar, etc, etc, etc… Puedo dar mil ejemplos, pero todos con un nexo común por <<ser mujer>>.

Por dedicarme a lo que me dedico, soy Criminóloga especializada en Victimología, mucha gente me pregunta, ¿es tan grave como nos lo ponen todo esto de la violencia contra la mujer?, y solo puedo responder: SÍ. Siempre lo ha sido y por desgracia será. Se ha avanzado y mucho, tanto que España es referente, pero… siempre hay un pero, se olvida algo tan básico como la prevención, debemos educar tanto a ellos como a ellas, atacar a la raíz del problema. 

Me parece algo tan injusto que las mujeres seamos la mitad de la población mundial, y en algunos lugares aún estemos silenciadas,  incluso que en derechos seamos menos que los hombres, hasta el punto que una vaca valga más que una mujer, o se comercialice con nosotras. Ya, ya sé… que eso está muy lejos, que aquí en España eso no pasa. ¡Válgame Dios! que aquí estamos muy bien.

Siempre… siempre digo lo mismo, el día que mi hija pueda ir «medio desnuda», de noche por una calle llena de hombres, sin que se sienta violentada, ese día podré decir que ya estamos en condiciones iguales que con los hombres. No sólo es cuestión de leyes, por mucho que las cambies si la sociedad no cambia con ellas, poco se podrá hacer, y normalmente las leyes siempre van por detrás, pero en este caso curiosamente aún hay mucho trabajo por hacer.

Como bien dijo Golda Meir, << No puedo decir que las mujeres son mejores que los hombres. Pero puedo decir, sin duda, que no son peor»>>.

 

Por Xisca Ferrer.

Coordinadora de » Iter Victimae «.