Me va a caer mucho hate por esto, pero lo digo, mi hijo tiene 5 años y no tiene Tablet, ni la va a tener hasta que tenga una edad considerable. En casa, mi marido y yo, somos anti pantallas, tenemos teléfono móvil, como es lógico, pero no somos unos obsesos de las Redes Sociales ni nos pasamos con el móvil en la mano el día entero. Así que nuestro hijo ni ve videos o dibujos animados en nuestro móvil ni tiene tableta.

Algunos hijos de mis amigas que tienen sus propios móviles. La madre o el padre se compran un teléfono nuevo y dejan el viejo para que el niño vea en él los dibujos. Niños de dos, tres y cuatro años. Lo siento, pero es algo que yo para mis hijos no quiero.

 

Y ya el colmo es ver un bebé de meses con un adaptador para el móvil en su carrito viendo los dibujos. Que no lo digo yo, que lo dice la Organización Mundial de la Salud, que no se debe exponer a pantallas a niños menores de dos años, y de dos a cuatro años, limitar el uso a una hora al día. Hay estudios que demuestras que el uso de las pantallas es perjudicial para los niños tan pequeños.

Hasta tal punto huimos de las tecnologías que hemos apuntado a nuestro hijo a un colegio que nos pilla lejísimos de casa, porque el más cercano es tecnológico y los niños en lugar de libros, llevan un Ipad. Salimos con tal susto de la jornada de puertas abiertas (esa es otra aventura, elegir colegio para tu hijo…) que descartamos inmediatamente aquel colegio y seguimos buscando.

Entiendo que los tiempos cambian y que las tecnologías están muy presentes en nuestras vidas, pero prefiero que mi hijo atienda en clase al profesor a que no haga ni caso porque luego en casa puede ver en la tableta un video con la lección explicada. Y no hablemos de lo malo que es para la vista tanto uso de pantallas.

Al final, creo que nosotros somos los padres raros, porque casi todos los papás de nuestro entorno, quien más o quien menos, deja el móvil a sus hijos para que vean videos. Pero creo que mi hijo aún debe jugar con juguetes. Ya tendrá tiempo de coger una tablet, un teléfono móvil, un ordenador o una videoconsola.