Quien me conoce sabe que soy romántica hasta la médula, que vivo a base de novelas de Nicholas Sparks y que no hay nada que me guste más en el mundo que una buena historia de amor de esas que te hacen llorar con mocos incluidos.

Así que le hemos pedido a cinco de nuestras Loversizers que nos cuenten cómo le pidieron matrimonio ellas a sus parejas para romper estereotipos de género y volver a creer un poco en el amor después de tanto Manuel y Lucía.

Laura:

Mi churri y yo llevamos 10 años de matrimonio. Nos conocimos haciendo voluntariado en una protectora de animales así que siempre tuve claro que me gustaría que nuestros peludos tuviesen un papel importante en nuestra boda. Como él no se atrevía a dar el paso, me lancé yo. Le escribí un montón de carteles explicando las razones por las que me quería casar con él y le puse un cartelito a los perretes. Yo me pasé la mitad del momento llorando jaja pero fue muy bonito y especial a nuestra manera. Ahora somos una familia de cuatro: nosotros dos y nuestros dos gatetes.

Arancha:

La historia de mi marido y mía es preciosa y siempre nos piden que la contemos. Somos de un pueblecito pequeño de Málaga de no más de 200 habitantes y nos conocemos desde siempre. Hemos estado muchos años entre el sí y el no porque nunca había timing hasta que en el verano de 2016 nos besamos en la feria y desde ese momento hemos sido inseparables. Estaba tan segura de que era él o nadie que no me pude esperar a que me lo pidiera él y en verano de 2018 en nuestro aniversario le puse en mitad de la plaza del pueblo con un proyector un vídeo con grabaciones nuestras de cuando éramos pequeños que me fue dando la gente del pueblo. Fue muy emotivo porque había vídeos nuestros gateando, jugando con otros niños, de adolescentes bailando...en fin, toda una vida juntos. Al final del vídeo le preguntaba si se quería casar conmigo y por supuesto dijo que sí. Llevamos varios años de matrimonio y no podemos ser más felices.

Miriam:

La verdad es que yo nunca he sido muy fan del tema bodorrio pero mi pareja y yo nos íbamos a vivir a Miami por temas de trabajo y teníamos que casarnos. Como estábamos un poco agobiados por todo el tema burocrático del visado y demás pues se me ocurrió currarme una proposición bonita para sorprenderle y preparé un viaje exprés a Madrid,  con una habitación preciosa de hotel con vistas al palacio de oriente y le llené la habitación de globos rojos que tenía que ir explotando con diferentes formas de decir te quiero en una infinidad de idiomas. Fue algo sencillo pero cargado de sentimiento.

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Alba:

Mi pareja y yo somos muy jugones y fans declarados de los juegos de mesa, así que se me ocurrió prepararle a mi pareja un trivial con preguntas nuestras desde que empezamos a salir hasta que nos fuimos juntos. Diseñé un tablero de Trivial currándome las categorías y se lo pegué con pegamento a un tablero de parchís y luego sólo tuve que diseñar unas tarjetas con las preguntas y mandarlo a la imprenta. Quedó bastante bonito y fue muy divertido. Cuando consiguió todos los quesitos tenía que enfrentarse a la pregunta final que evidentemente era si quería ser mi compi de juegos para toda la vida.

Spoiler: dijo que sí.

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Redacción WLS