Va llegando la ansiada desescalada o lo que ahora conocemos como la nueva normalidad. Desde hace casi un mes ya nos empezaban a permitir sentarnos en una terracita al sol con una cervecita mientras disfrutábamos de los ansiados reencuentros con amigos y familia.

Toda precaución es poca, ¿verdad? En algunas terrazas, incluso, han incorporada mamparas transparentes para que el acercamiento con nuestros acompañantes sea el justo. Aún así, los que nos hemos esperado un poquito más a que todo esto vaya pasando, somos la resistencia. Pero… ¿qué me decís del crush que os manda un mensajito para que os veáis ya? ¿Y de los ligues con los que llevas hablando toda la cuarentena?, ¿qué? Para esos hay que coger agenda y lápiz e ir programando cada cita.

Ayyy… sí chicas, las citas. Ha cambiado todo tanto en tres meses que… ya pocas cosas son como recordamos. Cosas tan sencillas como darnos dos besos o un abrazo cuando llegamos al bar y nos saludamos. Robarle un beso a tu love después de un sorbo fresquito de cerveza, limpiarle el bigotito de los restos de la espuma o darle la mano.

beso robado

Ahora todo es un poco más frío. No sabes muy bien cómo reaccionar. Por ti, por la otra persona, por si vas a saludarle y se retira porque no quiere contacto. O a lo mejor sí lo quiere y os quedáis un poco los dos como sin saber qué hacer… Me entendéis ¿no? Si antes nos daba un poco de pudor saludarnos porque no sabíamos muy bien cómo, ahora nos ocurre lo contrario. Nos da pudor el no saludarnos y parecer distantes. No me malinterpretéis. En realidad, debemos ser muy, muy cuidadosos y mantener las medidas de seguridad. Eso siempre.

Pero es cierto que a veces las emociones nos pueden. Y creo que todas estaremos de acuerdo en que, no es igual mantener la compostura con nuestros amigos que con nuestra pareja, ligue o cualquier persona con la que tengamos cierta atracción. Vamos a ver, que no somos de piedra. Que llevamos tres/cuatro meses sin vernos y muchos y muchas en su deseado encuentro no pueden reprimirse más.

Hablamos de las citas, de sus sensaciones y reacciones con personas que ya conocemos y por las que ya no podemos aguantarnos más las ganas de fundirnos, aunque sea un abrazo y un beso. Pero ¿qué pasará de ahora en adelante cuando queramos conocer a alguien de nuevo? ¿nos atreveremos? ¿Nos podrá el miedo? Amiga. En este punto déjame decirte una cosa. Respeto siempre. Miedo nunca. En esta nueva normalidad debemos tener cuidado sí. Que el virus aún sigue por ahí es un hecho, pero también es verdad que no podemos vivir con esa sugestión las 24 horas del día, 365 días al año (este año 366).

Susto

Algunos expertos hablan de este miedo y de cómo nos puede afectar esto en un futuro a la hora de estar conociendo a alguien. Algo en lo que siempre pensamos es: “¿y si es asintomático y me contagia?” Igual somos nosotras las que estamos pasando el virus si darnos a penas cuenta. Pero el miedo sigue ahí. Algo que también cambia son, sin duda, los lugares de encuentro. ¿Qué haces? ¿te llevas a casa a alguien que no sabes si estará pasando el virus? Aunque intentamos siempre ser lo más prudentes posible, a veces es imposible controlar todo lo que tocamos y en una casa, os aseguro que se tocan muchas cosas. Mando de la televisión, pomos de la puerta, cisterna…

En definitiva, nena: Absolutamente todo lo que decidas es muy respetable. Tanto si te apetece quedar con alguien con las medidas de seguridad oportunas, como si prefieres seguir esperando un poquito más. Que nadie te presione. A esto se le llama ‘Nueva Normalidad’ por algo. Hay cosas que debemos asumir que han cambiado (por lo menos por ahora) y que hay que respetar. Nos debemos acostumbrar.

Pero recuérdate esto siempre: disfruta mucho, muchísimo de cada momento, incluso de los que ahora nos resultan un poquito incómodos; de nuestras reacciones cuando nos volvemos a encontrar con alguien… Todo formará parte de nuestros recuerdos, serán anécdotas que podremos contar y nos reiremos de la cara de tontos que se nos quedaba cuando íbamos a dar un beso a alguien y nos hacía la cobra (sin querer hacerlo).

@merchehache