Hola, ¿os acordáis de mi? Si, soy aquella que renegaba del Tinder hace unos años… Pero he de confesar que al final acabé cayendo, y no, no fue durante el confinamiento, fue bastante antes…

Ésta es un poco mi historia: chica cumple años acercándose peligrosamente a los 40 y considerándose aún más chica que mujer, pero a su alrededor ya está todo el pescado vendido y acaba tirando de aplicaciones para conocer maromo. Nada nuevo bajo el sol…

En fin, que después de unos años deslizando más a la izquierda que a la derecha, quedando con gente normal y con algún que otro personaje, soportando un ghosting tras otro y pasando días y días sin hacer un cochino match, creo que ya he adquirido una autoridad para hablar de Tinder como una experta. 

Bueno, experta en no encontrar a nadie porque, tras 3 largos años intentando encontrar ese amor verdadero que todo el mundo dice que existe en Tinder, yo aún no lo he encontrado, así que sigo deslizando a izquierda y derecha un ratito cada noche mientras veo la serie de turno… Maravillas del ligoteo moderno, oiga…

En lo que sí me he convertido una experta es en detectar perfiles falsos, y no hablo de esos que parecen un supermodelo recién salido del gimnasio y a los que directamente doy que No porque sé que no existen… Hablo de esos perfiles con los que haces match y todo es super bonito, pero hay algo en tu cerebro (en la esquinita de “Echa el freno Madaleno”) que te dice que vayas con cuidado.

Así que si estás en esa situación y necesitas un poco de ayuda para detectar qué es exactamente lo que falla, sigue leyendo, que te voy a contar algunas de las señales que me han servido para darme cuenta de que estaba ante un perfil falso…

(Disclaimer: esto no es un estudio real en el que todo lo que digo es 100% verídico, es decir, puede que no se den estos puntos y aun así sea un perfil falso, o puede que sea una bellísima persona a la que le estamos buscando las cosquillas. Pero por si acaso, ojo avizor).

Señal 1: es “demasiado bonito para ser verdad”

Todas nosotras hemos crecido con las pelis de Disney y soñando con que un caballero se enamora de nosotras a primera vista y, aunque sabemos perfectamente que esas cosas no pasan (o no suelen pasar), una pequeña parte de nosotras aún cree en las películas de amor y los finales felices.

Pero amiga, lamento decirte que, salvo contadas excepciones, estas cosas en la vida real no pasan. A mí en el momento en el que, sin habernos conocido, me están diciendo que soy perfecta, que les encanto, que quieren pasar el resto de su vida conmigo, se me enciende la primera alerta.

Si te pasa esto no tiene por qué ser una señal clara de que es un perfil falso, pero pon tus sentidos a funcionar, por si acaso… Ah, y si te dice que se ha quitado el Tinder porque sólo quiere estar contigo, sospecha también, que puede parecer muy romántico, pero probablemente es una mentira como una casa.

 

Señal 2: habla raro

A ver cómo explico esto… En mi caso, estos perfiles falsos con los que he dado han sido tanto gente que hablaba en español como gente que hablaba en inglés, y en ambos casos había algo que me hacía sospechar.

No es que yo sea ortografinazi (que lo soy), puedo entender que haya gente que con el móvil escriba rápido y se coma las tildes, las comas e incluso algunas letras. Hablo de gente que escribe mal porque no sabe hacer frases gramaticalmente correctas. Imagínate que en vez de decirte “Me llamo Jorge, soy de Madrid, soy abogado en un bufete y estoy buscando una relación seria”, te dice “Mi nombre Jorge, vengo de Madrid, trabajo abogado en una empresa de abogados y busco una mujer buena para pasar toda la vida”

Ahora mismo no puedo poner un ejemplo real porque, como imaginareis, a estas personas las he bloqueado, pero os podéis hacer una idea de lo que quiero decir. Si habla como un niño de Preescolar, sospecha.

 

Señal 3: tiene una historia turbia

Con turbia no me refiero a que tenga un pasado oculto y traumático a lo Christian Grey (si, también renegué de esa mierda y acabé leyéndolo, como todas), pero te cuenta algunas cosas que te hacen sospechar…

Sus padres eran pobres y no le pudieron pagar una buena educación (de ahí que no sepa hablar bien, o eso dice…), es huérfano y no tiene hermanos ni familia y se siente muy solo y busca a una buena mujer para llenar ese vacío, tuvo que dejar su país porque no tenía trabajo y tuvo que buscarse la vida…

Todo esto puede ser 100% real o ser un truco para que te dé pena y no puedas ni siquiera pensar en dejar de hablar con él porque cómo le vas a abandonar tú también… 

 

Señal 4: no responde a tus preguntas

Esto es un poco contradictorio porque te cuenta sus penas pero, al mismo tiempo, no contesta a lo que tú le preguntas o te contesta con respuestas vagas… Si quieres saber qué tal le ha ido el día, su respuesta será un escueto “Bien” o algo como “Muy liado, prefiero no hablar del tema”, y no conseguirás sonsacarle mucho más…

Hablaréis de si os gusta viajar o el cine o leer, pero no te contestará a tus preguntas de cuáles son sus destinos favoritos, qué película le ha emocionado más o qué libro está leyendo.

Quizá nació en Madrid y no tiene hermanos. O se mudó desde Londres y no se lleva bien con su familia. O vive lejos de su casa y no tiene muchos amigos… Pero no te contará más, por muchas veces que le preguntes. Así que sólo sabrás de él que tiene un pasado turbio, que se dedica a esto o lo otro, y ya. 

 

Señal 5: tampoco quiere saber mucho de ti

Sólo te preguntará lo justo para saber si le interesas y para que parezca que tenéis una conversación fluida y que él quiere conocerte, pero la realidad es distinta…

Quizá te pregunte cada noche qué tal te ha ido el día, pero no necesita ningún detalle de por qué hoy has salido cansada de trabajar. Tampoco necesita que le cuentes cuántos hermanos tienes o qué estudiaste ni hablaréis nunca de temas profundos como por qué a ambos os gustó tanto aquella peli de Kurosawa.

Eso sí, puede que te pregunte cosas como “¿Qué haces despierta a estas horas?”, “¿Vas a quedar con alguien hoy?”, “¿Qué hiciste ayer? No me escribiste en todo el día”…

 

Señal 6: te hace sentir mal

Te da un poco de cal y otra de arena porque, al mismo tiempo que te adula y te llama cariño, mi amor, o te dice que eres la chica más guapa del mundo o que te necesita, te reprocha que no le hayas escrito o que hayas tardado en contestar

También te reprocha que le digas que no te sientes cómoda cuando te llama amor, cariño, preciosa o te dice cuánto te quiere… porque claro, él está in love y lo da todo y tú no sientes lo mismo y es que “Yo pensaba que estábamos hechos el uno para el otro, pero me estás apartando…”.

Vaya, que te dice que se siente mal, con el único objetivo de que tú te sientas culpable porque, sin saber ni cómo, le has hecho sentir mal a él… Ay amiga, no caigas en eso por favor, ni con alguien de Tinder ni con tu novio ni con tus amigos… ¡Cuidado con las relaciones tóxicas!

 

Señal 7: ¿de verdad te faltan más para darte cuenta de que algo no funciona bien?

Seguro que ahora te preguntas cómo estoy tan segura de que estas señales indican que he dado con un perfil falso, así que te voy a poner dos ejemplos claros (y 100% reales).

Ejemplo 1:

Chico guapísimo, nombre extranjero, pero te dice que es español y, aun así, habla español un poco raro, como si no fuera nativo. Su excusa es que su familia era pobre y no le pudo pagar una buena educación, pero el problema es que tiene casi 40 años y sus frases parecen salidas de la boca de un niño de 4

Te cuenta que es de España, pero que vive en el extranjero y se siente muy solo porque no conoce a nadie y tiene que trabajar mucho, juega con la pena e intenta que empatices con él…

A ti la situación te escama y le pides alguna foto, rollo “Envíame una foto ahora tocándote la cabeza” y te la manda (porque es la típica foto que todo el mundo pide para comprobar que alguien es real, jajaja…). Pero tú, que eres rubia pero no tonta, sigues sospechando, le dices que algo no te cuadra y que crees que esa foto no es suya y que la puede haber sacado de internet.

¿Qué ocurre al final? Chico se enfada, te dice “Buena investigación” y te bloquea. Días después, trasteando por Tinder, ves la misma foto pero con otro nombre, otra descripción y otro tipo de trabajo. Y te das cuenta que fuiste muy lista sabiendo que algo fallaba…

Ejemplo 2:

Chico guapo, elegante, con estilo, nombre extranjero pero no especialmente británico, te cuenta que es de Londres pero que desde hace unos meses vive en Madrid y que, como tiene su propio negocio en casa, no conoce a mucha gente. Y tú piensas “Chico, ¿y te has mudado en medio de una pandemia para teletrabajar?”…

Habla raro para ser británico, como si el inglés no fuera su lengua materna, pero decides seguir investigando porque oye, el chico es mono y parece majo.

Te habla de lo mucho que le gusta su trabajo y de que además invierte en Forex, que eso le da mucho dinero y le gusta mucho. Te pregunta si lo conoces y tú le dices que sabes lo que es, pero que tú no inviertes. Te pregunta por qué y te dice que a él le encantaría que invirtierais los dos, porque no hay nada más bonito que una pareja que invierte unida (bueno, igual no era así, pero ya me entiendes).

¿Qué ocurre al final? Chico te manda un link y te dice que te registres, que es gratis, pero como tú no eres tonta y sabes lo fácil que es robar datos a la gente con un link de ese estilo, le dices que lo sientes, pero que no te interesa y que adiós.

Días después lees una noticia en el periódico sobre hombres y mujeres que, fingiendo buscar pareja en apps para ligar, consiguen los datos bancarios de la gente mediante links y les roban su dinero. Y tú agradeces lo lista que has sido por darte cuenta…

En definitiva chicas, que cuando se os encienda la alerta en el cerebro, no la apaguéis, hacedle un poco de caso, que las pelis nos han dicho que hay que dejarse llevar por el corazón, pero la realidad es que hay que fiarse de nuestro cerebro y de nuestra intuición.

Y a mí mi cerebro y mi intuición me dicen que cuando algo es demasiado bonito para ser verdad, es porque es más falso que una moneda de 3 euros. Así que NEXT.

 

Carla