Crianza
Odio no saber qué es lo mejor.
Odio chillar. Odio no dormir.
Odio los parques. El rosa y el azul.
Odio la norma. La imposición. La intransigencia. Los juicios.
Odio recoger los mismos juguetes una y otra vez. Un día. Dos días. Todos los días.
Los mocos. El apiretal. El dalsy naranja. Los pinchazos de bexero.
La fiebre.
Los noes. Las rabietas.
Odio enfadarme. No tener tiempo de jugar.
Odio que llueva y no salir a saltar charcos.
Odio el silencio.
Madrugar.
Trasnochar.
La plastilina.
Me he dado cuenta de que odio a lxs haters. A lxs que todo critican y todo dicen hacer mejor.
Odio que a veces A VECES me duela la crítica.
Odio no saber.
Odio no poder.
No saber…
No poder…
Y es entonces cuándo sé que yo he nacido dos veces.
Para aprender. Para intentar. Para crecer.
Y del odio al amor, no hay un paso.
Pero sí tengo en mi mano
TRANSFORMAR. DESCARTAR. PRIORIZAR. RELATIVIZAR.
Y
QUEMESUDEELCOÑOTO
Amo a mis hijos.
Amo equivocarme y aprender.
Amo el rosa sin prejuicios.
Amo la risa de mi niña en el parque.
Amo los abrazos por la espalda.
Amo la crítica constructiva.
Amo a algunos padres y madres que forman tribu. Que son familia.
Amo a quienes me enseñan cada día.
Mis hijos. Mi Arrogancias. Mis amigxs. Mi familia.
Y me amo a mi misma por lo que he sido, soy y seré.
Y por lo que soy capaz.
Pero por mucho que quiera no me da el amor para tanto.
Sigo odiando la plastilina.
Odio a Peppa Pig.
Y odio con todas mis fuerzas las canciones:
‘Otra vez voy a buscarte. Nada puede detenerme’
‘ El lorito Pepe es un meterete’
‘La vaca lola’
Y
‘Bartolito era un gallo que vivía muy feliz’
NO
PUEDO
LADY APEGO