La vida da muchas vueltas y a mi en concreto me ha dado una que me ha mareado bastante y quiero compartir con vosotr@s

Durante toda mi estancia en el colegio y más de diez años avalándolo me han hecho bullying, me han insultado, despreciado, generado complejos y principalmente, me dejaron pasar mi niñez sola. 

Uno de los niños que mas se metía conmigo en aquella época y que pronunciaba con mayor ímpetu la palabra GORDA ha vuelto a aparecer en mi vida. 

Sí,  dieciocho años después ha vuelto a contactar conmigo. 

Como os decía la vida da muchas vueltas y much@s de l@s que de pequeños eran niñ@s ejemplares y prometían ser mentes brillantes en el futuro además de perfectas personas para la sociedad, han sido todo lo contrario. 

Con el paso a la adolescencia yo me supe reconstruir de mis cenizas, resurgir cual Ave Fénix y cumplir gran parte de mis sueños. Lo que para este “ser” se resume en “La gorda dejó de ser gorda, ahora está buena y es popular, yo me la follaba”

Y lejos de abrir un mensaje de arrepentimiento o algo similar que me lleve a pensar que las personas cambian a mejor y se arrepienten de sus errores, leo esto:

  • Hola guapísima, como has cambiado, quien me diría que después de tanto tiempo la niña gordita de la clase sería quien es hoy, me encantaría que pudiésemos quedar algún día e invitarte a cenar o comer y oye, “lo que surja…” jejeje 😉 ¡Cómo has adelgazado! Si lo llego a saber… Te dejo mi teléfono y te mando algunas fotos mías ahora, mándame tu algunas anda 😝  

 

Increíble, ¿verdad? La poca vergüenza existe, pero el karma también y a muchas de estas personas la vida les ha puesto en el lugar que siempre han merecido. 

Paciencia chicas, todo llega… 

Sara Astarloa