Salir del armario es lo más difícil que he hecho.

Me divorcié hace cuatro años. Mis hijos tenían 10 y 8 años. Fue complicado, pero ambos pusimos de nuestra parte para que estuviéramos todos bien.

No voy a entrar en detalles de la montaña rusa de emociones que viví, pero sí que puedo decir que en este tiempo me he conocido a mí misma.

Una de las cosas que quise hacer fue experimentar, porque estaba muy acostumbrada a que todo era igual. Siempre follábamos los sábados por la noche y como mucho dos veces al mes. Las mismas posturas, el mismo tiempo y cada vez con menos ganas.

Después de asimilar que empezaba de nuevo, conocí a muchos amigos y amigas. He tenido rolletes, amigos con derechos, pero llevo un tiempo con mujer de la que me atrevo a decir que estoy enamorada.

Llevamos saliendo casi un año, pero ahora ya es una cosa más seria. Me gustaría que se quedara en casa a dormir, que viniera a comer y hacer vida normal sin esconderme. Pero no sé cómo hacerlo.

A veces me imagino lo que me gustaría que viniera a casa, pidiéramos pizza y viéramos los cuatro una peli, pero falta lo más importante: ¿cómo le digo a mis hijos que ahora estoy con una mujer?

Su padre ha rehecho su vida y conocen a su pareja. No creo que lo lleven mal, pero esto es fuerte.

Puede que sea yo la que lo exagera, pero, ¿cómo le digo a dos adolescentes que ahora mamá tiene novia?

He leído cosas en foros de que hay que quitarle importancia y no presentarla como “una amiga”, porque ya no son tan niños y no son tontos, pero no me atrevo.

¿Y si se ríen de mí? ¿Y si se caen mal entre sí? ¿Y si me juzgan?

La verdad es que no lo sabe nadie, ni mis amigos cercanos ni familiares. Me ven muy bien, contenta y siempre con una sonrisa y se huelen algo.

Me da igual si mi madre se cae de culo al ver que su hija, tras 15 años de matrimonio y unos cuantos novios a las espaldas, ahora tiene una pareja de su mismo sexo, pero como si se lo digo a los niños y veo una mala reacción, me moriré.

Ella no me quiere forzar, pero sé que está harta de que hablemos a escondidas, nos veamos solo los findes que yo no tengo a los críos y no pueda subir una foto nuestra por el qué dirán.

De momento solo sé que es mejor que se lo cuente a ellos y luego la conozcan a ella, porque si la meto directamente en casa y ven muestras de cariño, igual se quedan descolocados, pero no sé ni cuándo ni cómo soltarlo, lo único que tengo claro es que no debería tardar en hacerlo.

 Anónimo.

 

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