Un vídeo de más de treinta minutos en Youtube repasando la historia de las actrices/actores gordxs en el cine y la televisión. Una Andrea que recoge datos, los expone divinamente, opina y se mantiene un poco al margen al mismo tiempo para que cada uno saque sus propias conclusiones.

YouTube video

Es algo de lo que hemos hablado tantas veces en WeLoverSize que nos sigue sorprendiendo cada vez que alguien lo menciona, lo recoge o lo expone y la gente se echa las manos a la cabeza diciendo cosas como ‘yo no me había dado cuenta’. Pero claro, al final el público al que llegamos es limitado y es una suerte que personas como Andrea sean también portavoz. 

Desde el directo que hicimos esta cuarentena con Betty y María, hasta todos los artículos que hemos escrito al respecto, pasando por compartir vídeos como el de Andrea, siempre hemos reivindicado lo mismo: necesitamos gordas en el cine, necesitamos referentes, necesitamos ser ejemplo de las futuras gordas del mundo, necesitamos que sepan que no tienen que pedir perdón por existir, necesitamos que entiendan que somos muchas y que no pasa nada por ser quienes somos.

Cuando hablamos de gordas hablamos también de peña LGTBIQ+, de personas racializadas, de cuerpos de todos los tipos. Desde hombres con sobrepeso, hasta gente en silla de ruedas, pasando por adolescentes con acné y terminando cuerpos envejecidos que por mucho que insistamos en invisibilizar: EXISTEN.

En este caso como es lógico y evidente, nos centramos en torno a personajes gordos, más específicamente a mujeres gordas en pantalla y es tal el nivel de alucinación que provoca hacer un repaso por la historia del cine/televisión en cuanto a estos personajes… Es para echarse las manos a la cabeza, de verdad de corazón. Repleto de los topicazos que cada vez compra menos gente: gordas que no hacen deporte, flacas que prefieres la muerte antes que engordar, chicas que son rechazadas infinidad de veces por hombres por no tener ‘el cuerpo perfecto’.

Es que si lo pensamos se nos ha machacado durante tantos y tantos años al respecto que es normal que estuviéramos escondidas, que no alzáramos la voz, que no nos atreviéramos a ser. Por fin eso está terminando, estamos luchando, estamos empezando a ver un poco la luz al final del túnel. Series como Euphoria, This is Us o DietLand (entre otras muchas) hablan de la gente gorda como se debe, como se merece y como es. Sin caer en estereotipos manidos que no hacen más que alimentar una gordofobia cabalgante que nos azota a todos.

Como mujer, gorda y actriz que soy tengo mucho que decir, tengo mucho que reivindicar, tengo muchas anécdotas que contar. Desde que tengo uso de razón he entendido que yo jamás seré Julieta en Romeo y Julietaque durante todos mis años estudiando he tenido que ser la madre de compañeros que incluso tenían más edad que yo, que mis personajes siempre iban a ser los que no tenían arco, los que no se lucían, los que pasaban desapercibidos.

Pero ahora ya no, ahora ya no lo compro, ahora ya no me conformo. He tardado 27 años (y agradecida), pero por fin lo he conseguido: me he subido a las tablas de la Gran Vía estando gorda interpretando a una mujer sobre la que en ningún momento se menciona absolutamente NADA sobre su físico. Se habla de su orientación sexual, de su profesión, de sus gustos musicales… Pero no de su peso, eso no importa. Porque en la vida, ¡sorpresa! pasa lo mismo. Tú peso no te define, quién eres sí lo hace. 

Así que nada, sigamos en la lucha, sigamos intentándolo, sigamos consiguiéndolo. Seamos portavoz, ejemplo e inspiración. Seamos las caras que las niñas y jóvenes que un día fuimos necesitaban ver, escribamos historias que nos merezcan, interpretemos personajes que muestren que no estamos solas, que no eres la única, que te entendemos, que no pasa nada, que eres normal y preciosa.

Desde aquí a todas las personas gordas, a todas las mujeres más concretamente, a todas las mujeres gordas que se dedican al arte: pongamos punto y final a esta movida, dejemos de colaborar y de vender siempre el mismo personaje, seamos nosotras mismas y enseñémoslo con orgullo ante nuestra cultura. Podemos, se puede, lo estamos haciendo, estamos allanando el camino.