La ruptura Escanes-Mejide.

La relación de la Laura Escanes (26 años)y Risto Mejide (47 años) es algo que aún con el paso de los años gran parte de la sociedad nunca ha llegado a entender de todo. Como pasa con la mayoría de las parejas en la que la diferencia de edad se considera un obstáculo “insalvable”.

Desde “asalta cunas” para él hasta “caza fortunas” para ella han sido, entre otros, los calificativos que han tenido que soportar durante sus años de relación. Siempre más acentuados, como no, en el caso de ella con el pretexto de que estaba con él para hacerse famosa y vivir del cuento porque, ¿cómo alguien como ella podría estar con alguien como el?. Joven, guapa, delgada… ¿Qué habría pasado si hubieran tenido una edad similar o ella no hubiera sido el prototipo de tía cañón que la sociedad tiene en mente? En un porcentaje muy alto estoy segura de que habrían recibido mucho menos hate. Lo más probable es que en ese caso la balanza de inclinaría a preguntarse como es posible que él quisiera estar con ella. Porque claro, si no tienes un físico envidiable no sería raro que estés con alguien bastante más mayor, porque es lo que te toca, conformarte (lo risa me da solo de escribirlo).

Con el paso de los años juntos empezaron a callar bocas (no todas, sería imposible), llegaron incluso a casarse y tener una hija en común. Aún así, como puede pasar en cualquier otra relación, simplemente hay veces que las cosas no funcionan. Pero claro, en una relación como esta, ya de por si sesgada por la edad y físico de ambos, los comentarios y críticas no han tardado en brotar.

Y como no, al aumentarle el rumor de que ella podría haberle engañado con el streamer Mr Jagger, la pólvora no ha tardado en correr e intentar dejarla aniquilada.

Ahora ella es la “mala mujer” y él es el “pobre cornudo”. Los “lo sabía, estaba claro y se intuía que sucedería” no han tardado en salir de paseo. Encima, súmale lo que comentaba anteriormente, una hija en común. “Mala madre”, “como puede hacerle eso a su familia”. Porque todos sabemos ya que las mujeres desde que somos madres tenemos que vivir abnegadas a tal labor y dejar de disfrutar del mundo en general (nótese la ironía).

Y yo me pregunto… ¿no tiene acaso la misma oportunidad de rehacer su vida que otras personas? De empezar relaciones, equivocarse, tropezar, darse cuenta de que funciona, o de que no, rehacer, revivir.

Por el momento, tanto Laura como Risto han mostrado una actitud que podría verse como envidiable en lo que se refiere al término de su relación. Ambos se han dejado ver de cara al público de una forma correcta, educada y respetándose mutuamente en sus pocas declaraciones sobre el tema. De cara a dentro no podemos saber cuál es la realidad, a mi me gustaría pensar que es tal como la muestran. Dos personas, que independientemente de sus circunstancias se han encontrado en el camino, se han querido (y seguramente todavía lo sigan haciendo) y han comprendido que finalmente caminarán más felices separados.

La vida sigue, comenzarán nuevas relaciones y vendrán nuevos amores, para ambos. Ojalá puedan disfrutarlos en igualdad de condiciones.

 

N.