Vengo a contaros la verdad del verano y nuestro culo. Lo que realmente nos molesta no es el calor, son un sin fin de acontecimientos que nos pasan a las que tenemos el trasero grande. En este post haré un top 5.

 

  • Las sillas, nuestro peor enemigo.

 

¿Nadie se ha parado a pensar que una talla 50 o más se sienta en una terracita a tomar algo? ¿Por qué son tan pequeñas las sillas? A veces me he llegado a levantar con la silla clavada en el culo. Consejo, busca la silla que no tenga reposabrazos.

 

  • Sentarse puede llegar a ser fácil, pero levantarse…

 

Hablando de levantarse, ese dolor descomunal que sienten tus piernas marcadas al milímetro por las rayas de las sillas, qué me decís de eso. Consejo, lleva una camisa de cuadros en la cintura para ponerlo de base.

 

  • Toma el sol boca abajo decían, será divertido decían.

 

Nadie tiene en cuenta que cuando una parte de tu cuerpo está más elevada que el resto, está más expuesta al sol, y por lo tanto, hay más posibilidad de quemaduras. Si la juntamos con las dos anteriores nos encontramos con una bomba explosiva. Consejo, Silvederma me ha salvado todos los veranos.

 

  • Llevar shorts, esos milímetros de ropa que te visten.

 

He estado todo el verano anterior aceptándome y poniéndome shorts, algo que no va a cambiar este año, por dios señora, sus comentarios y sus miradas son los que hacen que no avance la sociedad. Disfruta de cómo tu culo luze con los shorts. A nadie le quedan mejor que a tí. Por otro lado, las rozaduras infernales. Consejo, o por lo menos el que me va de perlas, Bepantol en cantidad y libre todo el día.

 

  • Cuidado con la ropa anterior.

 

Aun recuerdo cuando llevaba unos shorts con esas braguitas de la regla y se asomaban por fuera del pantalón. ¡Qué vergüenza pasé! Además eran rosa fosforito y bien feas. Consejo, ten cuidado con la selección de tu ropa interior si vas a llevar shorts, mejor tanguitas o no llevar nada, hazme caso.

¡Qué le den al resto! Os invito a normalizar estos sucesos, es normal que se te marque una silla, que el culo no te entre del todo bien en una silla, que te quemes el culete… todo es normal. Normalicemos. Desde aquí hago un llamamiento a todos los centros de atracciones para que suban un par de tallas los asientos, que a nosotras también nos gusta gritar bien fuerte.  

Dicho esto, te quiero culito mio y culito vuestro. Y feliz entrada al verano.

SAR.