Tú, que lees Weloversize con avidez y tratas de interiorizar todo aquello que decimos. Tú, que estás aprendiendo a quererte como eres pero aún te cuesta. Tú, que has decidido cambiar el sofá por las clases de zumba, el coche por la bici, la comida basura por la comida basura. Tú, que no sabes por dónde empezar a ser una Gordibuena como nosotras, este post es para tí.
Piérdele el miedo a la palabra Gorda. Es un adjetivo como cualquier otro, no estamos hablando de Goooorda, Foca, Ballena, si no de gorda. Una puede ser gorda, delgada, alta, baja, rubia, morena, pelirroja, fea, guapa… Cuando aprendas a definirte a ti misma como gorda, dejará de afectarte que lo hagan los demás.
Cuídate sin volverte loqui y siempre pensando en tu mejor versión. No todas podemos permitirnos el lujo de ser como las supermodelos y decir eso de ‘Yo como de todo, me mantengo así durmiendo 8 horas, bebiendo mucha agua y haciendo yoga’. Las mujeres de a pie tenemos que comer sano, pegarnos la paliza en el gym o salir a correr, y hacer extra de ejercicio el día que cenamos pizza. Puede que te dé pereza, pero una vez que te aficionas a eso de hacer deporte, ya no hay vuelta atrás.
Come sano pensando en vivir muchos años. Si, lo sabemos, casi todas nosotras preferimos un plato de pasta a una ensalada, una pizza a una pechuga de pollo a la plancha, o una hamburguesa a un poco de pescado hervido. Podemos darnos caprichos de vez en cuando, pero tenemos que aprender a cuidar nuestra alimentación, que ya es hora. Para eso en Weloversize tenemos una sección especial de vida sana con un montón de recetas y trucos para que os pongáis las botas!
Disfruta de lo que tienes mientras trabajas por lo que quieres. Lo hemos repetido mil veces, aunque sepas que tienes que adelgazar (o no) no dejes que tu presente se vea limitado por lo que será tu futuro. Igual que una mujer que ha dado a luz tiene derecho a verse preciosa mientras se recupera del postparto, tú también tienes derecho a quererte ahora, igual que te querrás después.
Ponte mona (a tu manera). Es obvio que maquillarte y arreglarte no son la solución a todos lo males del mundo, pero verte mona es importante a la hora de quererte un poco más. O de empezar a quererte. Que si, que con el pijama de animalitos y tiradas en el sofá estamos tan cómodas, pero os aseguramos que la seguridad en nosotras mismas aumenta al mirarnos en el espejo con lo que cada una considere más TOP.
Cómprate ese bikini que nunca antes te habías atrevido a llevar. Créenos, a nosotras tampoco nos gusta esa lorza que se sale, la tripa al aire, o la celulitis en las piernas, pero ¿qué más da?, si quieres disfrutar de la playa o de la piscina no puedes dejar que tus complejos te lo impidan. No te compares con esa chica tan delgada de la toalla de al lado, todas tenemos algo que no nos gusta de nosotras, ella también.
Céntrate en las partes de tu cuerpo que te gustan. No te centres en ocultar la tripa, céntrate en potenciar tu pecho, no te agobies por tapar tus piernas, mejor céntrate en destacar el culo. Desviar la vista de nuestros ‘defectos’ no va a hacerlos desaparecer, pero no podemos pasarnos el día preocupándonos por lo malo, porque eso nos va a impedir disfrutar de lo bueno.
Rodéate de gente que te quiera. No pierdas más tiempo con quien que te mira con desprecio, con quien te da consejos para adelgazar ‘pero por tu bien, eh?’, con quien se avergüenza de estar con una gorda. Rodéate de gente positiva, que te quiera, que te valore, que te admire.
Lee Weloversize.
Foto de portada: Callie Thorpe.
