Cada vez somos más los que decidimos optar por una vida sin maltrato animal, ya sea no acudiendo a zoos, adquiriendo productos de cosmética que no testen en animales o no llevando pieles. Por este motivo no es de extrañar que el número de personas que deciden comenzar una vida vegetariana o vegana, sea cada vez mayor.

Como vegetariana que soy… bueno, para ser más específica, ovolactovegetariana, me he encontrando con variedad de situaciones sociales realmente incómodas que me han llevado a plantearme taparme las orejas y canturrear para hacer oídos sordos a depende de qué comentarios, o meter directamente la cabeza en el WC y tirar de la cadena.

Sí, lo sé, a veces soy demasiado dramática.

Como compartir es vivir, os traigo en este artículo una lista pasos o pautas a seguir si quieres ser el mejor amigo de tu amigo veggie; y creedme, os lo agradecerá con todo su corazoncito verde.

¡Empezamos!

1 – «¿Comes algo además de lechuga y tomate?»; «¿Atún tampoco?»; «¿Tienes días libres para comer lo que quieras?»; «Con lo buena que está la carne…»

Meeec, error; ni se te ocurra comentar algo así delante de alguien veggie. Claro que comemos algo más que lechuga y tomate, ¡hay multitud de cereales, legumbres, hortalizas y verduras para disfrutar en nuestra alimentación!

Y respondiendo al resto de preguntas que suelen ser de las más frecuentes… No, el atún tampoco lo comemos porque es un animal. No tenemos días libres de nada porque tener esta alimentación y estilo de vida es elección propia y libre, y sí, puede que sorprenda pero la mayoría de veggies no escogemos serlo porque no nos guste la carne o creamos que sabe mal, sino por motivos éticos.

2 – Interesarte por su motivación para dar ese paso

Si de verdad quieres y aprecias a tu amigo, intenta empatizar y pregúntale por los motivos que le han llevado a tomar esa decisión. ¿Quién sabe? Quizá sus motivos también puedan convertirse en los tuyos y, si no decides dar el paso, al menos puedes tener en mente la idea de reducir el consumo de animales. ¡Todo cambio beneficioso para el medio ambiente y el reino animal, es más que bienvenido!

3 – Escoge lugares que tengan platos para ellos

Parece una tontería, pero creedme, fastidia muchísimo ir a tomar una tapa o a cenar con amigos a locales en donde las únicas cosas veggies que podemos pedir, son patatas bravas y ensalada.

¿Por qué no elegir un lugar en donde haya surtido para todos? Y ya, si de vez en cuando decidís como destino un restaurante puramente vegetariano o vegano… ¡os querremos mazo!

4 – Abre tu mente

¡Interésate por abrir tu paladar y conocer nuevos sabores! Estaremos encantados de mostrarte los platos más deliciosos que jamás hemos probado.

Y creedme, algunos están de chuparse los dedos.

5 – «Pues para ser vegetariano/vegano, no estás delgado»

¿En serio? ¿De verdad se sigue preguntando algo así en los tiempos que corren? Dejadme compartir con vosotros que soy vegetariana desde hace más de seis años y la talla de mi pantalón no es precisamente una 38. Ni cerca se queda.

Patatas fritas, pastas variadas con salsas deliciosas libre de maltrato animal, pizzas, hamburguesas veganas, platos de nopollo, tempura… ¡En el mundo verde no todo está hecho a la plancha, cocido o al vapor! Y bien rico que está todo.

Y recordad que, además de todo esto, lo más importante siempre es el respeto. ¡Preguntad si hay algo que no entendáis o queráis saber! Estaremos más que encantados de ayudaros.

 

Lunera Cascabelera