Mi top 10 de cosas que no soporto en la cama

Para gustos, los colores. Por eso hoy comparto mi top 10 de cosas que no me hacen ni un pelo de gracia en lo que viene siendo el folleteo, a sabiendas de que es una opinión personal. Puede que coincida con la de alguna de vosotras, o puede que no, pero al menos echáis un ratito la mar de ameno.

Escupitajos

No me mola nada. No solo no tolero que me escupan en ninguna parte de mi cuerpo, es que me da repelús cuando los veo a ellos escupirse en la punta para sacudírsela. Porque a ver, si es solo saliva, me da angustia, pero lo soporto. Lo que no puedo soportar es que el acto de escupir incluya sonidos guturales, porque entonces me caigo redonda. Solo faltaría un carraspeo con premio. 

Retorcimiento pezonil

A ver, que sí, que es una zona supersensible que da muchísimo juego y soy la primera dispuesta a jugar, ¡pero con cariño! Que yo creía que eso de que te toquen los pezones como si fueran a sintonizar la radio de coche era una leyenda urbana que solo pasaba en las películas y en las series, pero no.

Cachetes en el culo

Cachetes, cachetazos, cachetadas… tiene nombres mil como el miembro viril. Siempre que esté consensuado, ok, pero de normal no me suele encantar, así que seguramente diga que no. ¿La razón? Siempre me lo han hecho como a destiempo, que justo en ese momento no pegaba y eso desconcentra bastante, pierdo el hilo… vamos, que tardo más en correrme que otra cosa.

Que te pidan elogios

Una cosa es que a ti te salga de dentro decirle a la otra persona lo buenísima que está, lo mucho que te gusta lo que te hace, etc. y otra muy distinta es que te pida que se lo sueltes en mitad de la faena y, además, con exigencias: “Dime que te gusta. Oh, sí, te encanta, ¿verdad? Te gusta que te dé más fuerte” y tu mientras con cara de póker aguantando el tirón, nunca mejor dicho. Mejor no pedir nada y que tu pareja te diga lo que le salga de forma natural.

Que te llamen “bebé”

Retomando lo anterior, igual no es buena cosa que te suelten LO QUE LE SALGA sin ningún tipo de filtro. Hay apelativos cariñosos que, bajo mi punto de vista, deberían estar prohibidos en la cama y otros que directamente dan vergüenza ajena. Pero que te llamen bebé mientras te están PENETRANDO… en fin, sin comentarios. 

Mi top 10 de cosas que no soporto en la cama

Que no se callen

Igual sueno exagerada, pero es que una cosa es decir algo tipo “Me encanta” “Sigue” “Así mejor” “Más fuerte” “Más suave” y otra es estar todo el santo polvo aguantando o bien un monólogo de lo muchísimo que le pones o que te fuerce a mantener una conversación de esas que he mencionado antes de ponerlo por las nubes. Es un polvo, no una película de Tarantino. Los diálogos no son los protagonistas. Hay que estar a lo que hay que esta, hombre, por favor…

 

Que te den las gracias

Sobre todo, después de una paja o una mamada. No puedo, no. Me entran ganas de pedirle que me abone la sesión. De preguntar si tiene tarjeta club y si quiere que le diga el total de puntos acumulados. Definitivamente, no.

Sexo oral como preliminares

Qué daño ha hecho ese concepto de los preliminares. El sexo es sexo, vamos a olvidarnos un poquito del coitocentrismo, please. Y si encima van con ese pretexto es probable que te lo coma un poco, a modo de trámite, pero sin pretensión de hacerte llegar al orgasmo. Hombreeee. Eso sí que no. 

El “conejerismo”

Así es como he denominado al polvo conejero que es un mete y saca privado de todo carisma, que bien podría ser un ejercicio de pilates. Cero pasión y cero consideración. Habrá a quién le guste, no digo que no, pero yo echo en falta ahí un poquito más de sentimiento y, sobre todo, más estimulación en lo que viene siendo el clítoris. 

Dar por hecho las cosas

Al final, todo se resume en eso. 

Escuchad a vuestras parejas.

 

Ele Mandarina