La Energía de la Nueva Relación o ENR es un término muy usado en no monogamias pero perfectamente transferible a la monogamia.
Zhahai Stewart, activista poliamorosa, fue la primera en acuñar el término en los años 80, refiriéndose a la energía de la nueva relación como esos primeros momentos de obnubilación por estar pillándote por otra persona, cuando estamos a tope de serotonina y felicidad.
Suele englobarse desde un prisma emocional y sexual, pero puede verse en vínculos de todo tipo y con relaciones variadas. En contraposición a la ENR estaría la ORE, la Old Relationship Energy, la energía de una relación antigua, consolidada y que ya no está en esa etapa loca del principio.
Es importante, tanto en el poliamor como fuera de él, que sepamos transitar por esta etapa sin volvernos tarumbas, sin dejarnos llevar por cómo nos sentimos para tomar decisiones de las que nos podamos arrepentir luego, ni olvidarnos de otras relaciones por estar continuamente con ese nuevo crush que nos tiene enamoradas perdidas.
En monogamia esto se ve continuamente, lo que pasa es que cuando empezamos a sentir esto con alguien nuevo, dejamos a nuestra pareja anterior. En poliamor, sin embargo, es muy común la vivencia de sentir ambas energías a la vez: tener una relación estable de largo plazo y enamorarnos perdidamente de alguien nuevo, y en saber llevar las dos a la vez está la clave.
Si eres la persona que está viviendo esta fase de enamoramiento, no te olvides de cuidar a tus otras relaciones. Abandonarlas mientras te pasas el día follando con tu nuevo amorcito es una malísima idea, porque luego irás a buscarlos más tarde cuando se te haya pasado el conjunto de químicos cerebrales intensos.
Yo, de hecho, si una amiga me hace eso de forma continuada, luego paso de ella si vuelve. Porque, sinceramente, me toca bastante los cojones. Yo he estado muy enamorada y jamás he dejado de ver a mis amistades, qué queréis que os diga. En cambio, si otro de tus vínculos (en las relaciones abiertas), un amigx o alguien cercano a ti es quien está transitando esto, te aconsejo que te muevas en un gris: ni te enfades en exceso porque está pasando menos tiempo contigo (dale algo de cancha, el efecto es transitorio, ya volverá a la normalidad) ni le perdones todo, porque abandonarte por estar con alguien nuevo tiene una palabra y es: tóxico.
Para transitar esta etapa inicial de forma saludable, que haga que luego pueda convertirse en ORE, o en una relación monógama, hay varios consejos que se repiten y yo añado unos pocos, gracias a mi experiencia:
No tomes decisiones importantes durante el primer año de conocer a una persona.
Así de claro. Ni te mudes por vivir vuestro amor, ni te cases, ni tengas un hijo, ni os compréis una casa a medias. Simplemente dedicar el tiempo a conoceros. Si, por lo que sea, tenéis que tomar alguna de esas decisiones antes del año, intentad pensar de forma racional: no idealices en exceso a tu querido amante, te aseguro que en unos meses le empezarás a ver defectos.
Si tienes una relación abierta, pon un esfuerzo extra en cuidar tus relaciones antiguas.
Dedica tiempo de calidad a tus otros vínculos, propón planes nuevos, refuérzales verbalmente lo importantes que son para tí y lo mucho que agradeces tenerlos en tu vida. Usa lenguaje claro, con adjetivos concretos, y repite las veces que haga falta lo que necesiten para verse seguros mientras transitas esta energía con otra persona. Y por favor te lo pido, deja el puto teléfono a un lado cuando estés con ellos, tu nuevo amorcito no se va a morir si estás 5 horas sin mandarle un whats app, de verdad que no.
Disfruta esta etapa, folla mucho y sé felíz, pero cuídate a ti en el camino.
Creo que con la edad todas somos un poquito más conscientes de lo que necesitamos, queremos y cómo lo queremos. Conocer a alguien nuevo es una oportunidad maravillosa de transitar hacia una relación fresca, pero ya llevamos una mochila grande a la espalda de traumas, fantasmas de relaciones pasadas, manías y triggers varios. Comunicarse mucho, no caer en expectativas vacías y tener claro lo que queremos nos servirá como guía en esos momentos iniciales, donde nuestro coño nos gobierna mucho más que nuestro cerebro. Si quieres, pon todo esto por escrito, parece una tontería pero te aseguro que te ayudará mucho revisarlo a menudo mientras te enamoras.
Pon límites
Hazme un favor y no esperes a que seáis algo serio para poner límites sanos. Recuerda, un límite no es una amenaza, es una pauta personal (basada en lo que tú harás si ocurre tal cosa) que sirve para que la otra persona entienda tus necesidades y pueda respetarlas. Esperar a que ocurra algo que no nos gusta para ponerlos, o a ser pareja, me parece un error de los más comunes cuando se está en ENR. Cuando yo quedo con gente nueva en Tinder SIEMPRE, y digo siempre, pongo varios límites al poco de quedar. Los que yo pongo, por si te sirven de ayuda, son los siguientes:
- Como nos estamos conociendo, no me importa que quedes a la vez que conmigo con otras personas (si en tu caso prefieres conoceros desde la exclusividad, es igual de válido, solo comunícaselo), pero mi límite es utilizar preservativo tanto en el sexo oral como vaginal o anal.
- No me gusta que hagan (inserte cualquier práctica sexual que no te guste) conmigo, así que por favor, dejemos esa práctica fuera de nuestros encuentros.
- No realizo sexo oral sin preservativo sin ver un análisis de ETS e ITS anterior y reciente a nuestro encuentro.
Ten en cuenta que la persona que estás conociendo, durante los primeros meses, va a darte su mejor versión.
Es muy posible que las cosas turbias, red flags y otras maravillas ocultas no salgan a la luz hasta dentro de un tiempecito. Si además, ves red flags desde el principio, no te digo de qué envergadura serán las que deje para mostrar más tarde. ¿Te digo esto para asustarte? Para nada, todos tenemos defectos y cosas que no molan tanto, solo te lo digo para que tengas en cuenta que habrá capas extras de la persona a la que estás conociendo que no verás al principio, porque estás DROGADA DE DOPAMINA CARIÑO. Ves a tu nuevo amante perfecto y maravilloso.
