¿Soy a la única a la que le ha pasado?

Lo siento mucho cariño, pero tu mejor amigo me pone muy cerda.

Especifiquemos: estamos hablando de un tío con una labia y un talento para la música que se te va la olla. ¿Y que hay más morboso que un músico con mucho sex-appeal y talento? Para mí, en mi mundo de groupie esa combo es como un McFlurry con doble de sirope y oreo: IRRESISTIBLE. Tampoco nos vayamos por las ramas, adoro y quiero a mi chico con todo mi corazón, conozco a la novia de su mejor amigo y tenemos muy buen rollo los 4. Pero si, muchas veces, cuando estamos de comida, tomando algo o simplemente charlando me imagino empotrándole salvajemente contra una pared y haciéndole guarradas.

Mi mejor amiga se ha dado cuenta del asunto y por más que se lo niego, ella me tiene MUY calada. En una comida que organizamos recientemente, mientras el mejor amigo de mi chicho estaba contando una historieta, mi mejor amiga me mandó un whatssap “Cuidado con cómo le miras”. Lo leí, me fui al baño y me masturbé. Así, sin tapujos te lo cuento.

No nos confundamos: disfruto mucho del sexo con mi chico y no tengo ningún tipo de sentimiento respecto a su mejor amigo, pero… ¡Es que no lo puedo evitar!. Yo le escucho, cómo se expresa, cómo mira, como se mueve, el cuerpazo que tiene, la mirada negra profunda… es que lo tiene todo para mojarme las braguitas sin que ninguno de los dos lo deseemos.

El asunto ha llegado a tal punto, que muchas veces cuando mi chico me está comiendo el coño, me imagino que es su mejor amigo quien lo hace. Llevo meses fantaseando con la idea de follarme a los dos a la vez, sólo y únicamente porque sé que si fuera un trio no sería infidelidad (porque lo que me moja entera es pensar en follarme a su amigo a solas, claro). No te miento, no puedo contar con los dedos de las dos manos el número de veces que me he corrido, follando con mi novio y pensando en que éramos 3 en la cama.

Me siento culpable por las fantasías que tengo en mi cabeza. De verdad, muchas veces cuando estoy con su amigo pienso para mí “Si supieras la de guarradas que te hecho en mi cabeza” incluso hay momentos en los que me pone tan cachonda y tan cerda que le grito de mente a mente “¡Fóllame! ¡Fóllame! ¡Fóllame!” Menos mal que las cosas que tenemos dentro de la cabeza se quedan ahí: dentro.

Por momentos pienso: ¿Te imaginas que supiera todas las cochinadas que le he hecho en mi mente? ¡Dios mío!¡Me da algo!¡Qué vergüenza! ¡Que hasta le he comido el culo en mis fantasías matutinas!

Por lo menos sé que el asunto no es mutuo. No hay peligro de que sucumbamos a nuestros deseos más carnales. No hay tensión sexual ni nada por el estilo, es sólo mi mente perversa la que me juega malas pasadas y ¿Te cuento algo? Le he puesto su nombre a mi satisfyer.

¡Es que es muy fuerte! ¡Que llevo ya casi un año tocándome pensando en él! Te juro que creo que cuando está cerca mi cuerpo empieza a soltar feromonas o algo. A veces me pongo tan cachonda que pienso: tengo que oler.

No sé ¿Qué hago? ¡Llevo meses así! Intento evitar contacto con su mejor amigo para evitar sentirme culpable luego. ¿Creéis que le estoy faltando al respeto a mi chico? ¡No puedo elegir quien me excita! ¡También me excita Gerard Butler y eso no está mal! ¿Dónde está el límite? ¿Si es inalcanzable no es preocupante o cómo funciona el tema?

¡Necesito ayudita!

Anónimo

 

Envía tus vivencias a [email protected]