AMIGOS TÓXICOS, PUEDE QUE TÚ TAMBIÉN LOS TENGAS Y NO TE HAYAS DADO CUENTA

 

Todos somos mayorcitos y sabemos cuándo alguien no nos conviene, ok. Pero, ¿qué pasa si llevamos tanto tiempo con los mismos amigos que no nos hemos dado cuenta de que son tóxicos?

Veréis, yo me he empezado a coscar hace un tiempo de que dos de mis amigos no son exactamente lo que podemos considerar como “amigos”. A ver, tengo mis amigos cercanos, mis amigos de toda la vida, los que veo solo de vez en cuando, los que viven fuera de España y los que viven en el edificio de al lado. Esos, esos son el quid de la cuestión. ¿Son amigos tóxicos?

 

Al principio, hace años, mi novio y yo solíamos salir mucho con esta pareja porque los acabábamos de conocer y demás. Sacábamos a los perros juntos, jugábamos partidas de Trivial por las noches…en fin, un encanto. Con el tiempo me fui dando cuenta de que ella hablaba de otras chicas a las que conocíamos a sus espaldas y que casi nunca pagaba cuando salíamos a comer. No le di mucha importancia porque no las insultaba ni decía nada malo de ellas, simplemente no era sincera a la cara y daba una opinión sobre algo totalmente diferente de lo que decía por detrás. Lo que se llama una falsa de toda la vida vamos. Supuse que también lo haría conmigo, pero la verdad, siempre me ha dado igual lo que dijera y pensara la gente de mí.

 

Siguió pasando el tiempo y cada vez había más gestos, palabras o acciones que me olían a chamusquina. Cosas como dejarme tirada un día sin avisar, habiendo leído los mensajes de que YA ESTABA EN EL BAR ESPERÁNDOLOS y pasando tres kilos de decir que se habían ido de compras. Comentarios como “ha bueno, pues si está enfadada ya se le pasará”, que luego me contaba un amigo en común que había dicho. No pagar nunca sus copitas de vino y cuando le menciono en plan bien que pagase ella su bebida ya que yo solo pedía agua o una coca cola, quedar como la rácana que no quiere pagar el monto en común.

 

Otra alerta me saltó cuando dejé un trabajo que tenía como administrativa en un sitio que me encantaba, estable y cerca de casa, por uno de periodista (para lo que estudié) en una famosa revista de moda en Madrid y… a los seis meses no pudieron renovarme el contrato. Me quedé rota por dentro, ¿qué iba a hacer yo con mi vida ahora? Lo había dejado todo para perseguir mis sueños y me había estampado contra un muro. NI UNA PALABRA ME DIJERON. Ni cómo estás, ni alguna frase de ánimo ni nada… Me sorprendió la verdad.

 

Por ello, después de muchos años y mucho pensar, me he dado cuenta de que quizá, TENGA AMIGOS TÓXICOS. Porque esa palabra no hace referencia solo a que te “intoxican” y no quieren que salgas con otras personas, sino que no te hacen ningún bien. Como veréis son pequeñas cositas las que han hecho, tanto ella como su pareja, pero poco a poco, a lo largo de tu vida supone una relación que no me gusta nada la verdad. He aprendido a disfrutar de mi vida, mis amigos y mi familia, y no quiero tener cerca a ese tipo de personas que, aunque parezcan amigos, en el fondo no lo son. Son personas egoístas, que van a lo suyo, son educadas y amables sí, pero no quieren nada de ti salvo quizá sacar partido a algo. No les interesa cómo estás, qué te pasa o si pueden ayudarte.

Chicas/os/ques, no os juntéis con personas que en el fondo sabéis que no os hacen bien o que tenéis la sensación de que no son como los demás, que podríais tener en vuestra vida a alguien mejor al que realmente le importéis. Mandarles a tomar viento fresco. ¿Sabéis cómo lo hice yo? Simplemente siendo educada, cortés y dejando de salir con ellos. Poco a poco fueron pillando la indirecta. O ESO CREO JAJAJAJA.

 

Patricia Sevillano