Follar sin ganas
Según un estudio realizado por Sigma Dos para el Instituto de las Mujeres, casi el 60 % de las jóvenes españolas reconoce haber tenido sexo sin ganas. Al ver el titular del artículo publicado al respecto en El Confidencial (para leerlo pincha aquí), no he podido evitar preguntarme si yo he tenido relaciones sexuales sin ganas alguna vez. Cierto que yo hace tiempo que dejé atrás el grupo de edad de la muestra en base a la que se ha elaborado el informe (18-25 años), pero no me ha costado recordar que sí. De haber participado en el estudio por aquel entonces, yo habría sido una de esas seis mujeres de cada diez. Y por los mismos motivos: Por complacer. Porque toca. Porque el deseo femenino es lo de menos, al parecer.
Con todo lo que se ha avanzado y seguimos cediendo a esa presión aprendida y autoimpuesta. La de estar disponible, aunque no nos apetezca.
He seguido indagando y he encontrado multitud de información sobre el tema y sobre las razones más habituales por las que las mujeres están dispuestas a follar sin ganas. En su mayor parte tenemos relaciones sexuales sin ganas por cumplir, por amor y por evitar un posible conflicto. Guau. Si es que, visto así, una quiere pensar que no ha caído en eso jamás ¿verdad?
Sin embargo, que tire la primera piedra la que nunca se ha acostado con un chico porque en algún momento le ha dado alas y no quiere que se enfade; o que la tilde de calientabraguetas. La que es consciente de que hace demasiado tiempo que no tiene sexo con su pareja y sabe que eso va a acabar siendo un problema. Considérate afortunada si nunca has hecho algo similar.
Follar sin ganas
En cuanto a la falta de deseo, existen tres causas principales.
La primera es el cansancio. Lo cual resulta bastante obvio, no tenemos ganas de hacerlo cuando estamos agotadas. Otra cuestión es por qué nosotras lo estamos y ellos no. Si bien ese es un melón que da para su propio post.
La segunda es la ausencia de placer. Para muchas mujeres la causa de la falta de deseo se debe a que no encuentran placer en las relaciones sexuales. Es más que comprensible que alguien que no obtiene ninguna satisfacción en el sexo, no quiera tenerlo.
Y la tercera es la falta de preliminares. Las chicas cuyas parejas pasan de los preliminares terminan por perder el apetito sexual. Habrá a quien le guste el mete saca, pero a una gran mayoría no les motiva. Qué le vamos a hacer.
¿Hay solución? ¿Podemos dejar de follar sin ganas? Pues claro que podemos.
Recordemos que no somos objetos de placer. No tenemos por qué tener relaciones sexuales si no nos apetece. En ningún caso, bajo ninguna circunstancia.
Por otro lado, si el problema es la ausencia de libido, debemos preguntarnos si nos ocurre algo. Si se trata de agotamiento, de estrés. Tal vez de una falta de comunicación con nuestra pareja. Hablemos de ello, de lo que nos gusta, de lo que nos pone.
¡No renunciemos al placer! Nos lo merecemos.
Redacción WLS
