¡Directo desde el espacio exterior, aterriza en vuestro pene el Neptune!
Quizá pensaréis: «¡Pues vaya novedad! ¿Un anillo vibrador?». Pero es que este de Easy Toys.es viene con sorpresa, así que os merece la pena quedaros.
El Neptune , además de tener unas dimensiones, proporciones, diseño y colores poco usuales en un juguete erótico (más aún en un anillo para el pene), también tiene mando a distancia.
Puede que os preguntéis para qué puede servir que tenga mando a distancia, así que yo os lo explico: tiene diferentes patrones de vibración como otros juguetes vibratorios (unos diez), por lo que no me negaréis que es más cómodo y más práctico ir cambiándolos con un mando que teniendo que meter mano al asunto cuando estás en plena faena.
Por su forma, además de usarse con el propósito tradicional (estimular el clítoris), también puede emplearse con otros fines: al ser curvo, alargado y con unas dimensiones más grandes que un anillo normal, puede emplearse para, por ejemplo, estimular los testículos y la zona perianal, lo que lo convierte en un juguete interesante tanto para parejas heterosexuales como homosexuales .
Aunque, al menos en nuestro caso, lo de estimular la zona perianal ha tenido que ser con el juguetito sin poner, dado que, para ello, habría que ponerlo rodeando el pene y los testículos, cosa que nos ha resultado imposible (yo no sé si es que mi chico es un huevón o qué es lo que pasa, pero solamente podíamos abarcar la base del pene sin involucrar los testículos).
En las instrucciones de uso te indican que debes colocarlo antes de que el miembro esté erecto (cosa que nos parece bastante complicada, porque cuando mi chico fue a colocárselo, solo de pensar lo que íbamos a hacer, ya tenía la bandera a media asta), pero también puede colocarse con el pene erecto rodeando solo a este en lugar del paquete completo.
Una de las cosas que más nos ha gustado del Neptune (además del control remoto) es lo dura que se la notaba a mi chico cuando lo tenía puesto.
Hemos probado con anterioridad otros anillos y, al ser de un material más flexible y menos resistente, no tenían esa función tan presente.
Además, mi pareja tiene un aguante bastante importante per se, pero con el anillo ha aguantado aún más tiempo sin eyacular, así que son todo ventajas (o no, porque no veas lo que funden cuarenta y cinco minutos de cardio).
Otra de las cosas a tener en cuenta es que, su forma ergonómica que se asemeja a una «nave espacial» facilita su utilización en prácticamente cualquier postura que se os ocurra, por no hablar de que cualquiera de los miembros de la pareja puede ostentar el «poder del anillo», permitiendo que una pueda regular su propio placer o dejarlo en manos de su pareja y que te sorprenda.
Eso sí, algo a tener muy en cuenta: no hay que olvidarse que es un juguete sexual más y que, por ello, deberéis hacer uso de un lubricante de base acuosa cuando lo utilicéis, dado que la lubricación natural no suele ser suficiente.
Un último punto a añadir es que, al ser un anillo bastante grandecito, se puede emplear como bala vibradora y no tiene por qué estar unido al pene, lo que nos permite que sea aún más versátil si cabe.
En nuestro caso, yo lo empleé para hacerle a mi chico un pequeño masaje vibratorio con él en la zona perianal y los testículos, trazando círculos y ochos, mientras le practicaba una felación, y la verdad es que no protestó mucho (ja, ja, ja).
Así que, chiques, ya estáis tardando en probarlo y en descubrir todo lo que el anillo vibrador con mando a distancia Neptune tiene que aportar a vuestras relaciones sexuales.
Recuerda que en Easy Toys.es con el
código WLS15 tienes 15€ gratis en
pedidos de más de 50€
PUEDES COMPRARLO AQUÍ
Post patrocinado*
