¿A qué precio?

Inicio Foros Querido Diario Autoestima ¿A qué precio?

  • Autor
    Entradas
  • Melcup
    Invitado
    Melcup on #56919

    Hola a todos!
    Quería contaros algo desde la indignación más profunda.
    Siempre he sido «ancha», «jaquetona», «hermosa», «grandota»… Me encantan los eufemismos que utiliza la gente para no decir algo que se ve a simple vista, siempre he sido gorda.
    Hace un tiempo empecé a adelgazar «sin motivo aparente» hasta el punto de perder en poco tiempo unos 20 kg, hoy ya se que lo que tengo son problemas de estómago (nada grave).
    Bien, cuando empecé a perder peso «porque sí» lo achaqué a mucho estrés en el trabajo, hasta que dejó de existir ese estrés y yo seguía adelgazando. Llegó un punto en el que a mi cuerpo le sentaba mal hasta un simple te o unas lonchas de jamón york. Ojeras del tamaño del Retiro, caída de pelo, cansancio … pero para mi médico esto no era importante porque: «estás adelgazando y estás mejor así, eso no es nada.» (Tal cual y con dos coj***).

    A esto hay que añadirle que la gente solo sabía decirme que estaba muuuucho más guapa, solo por el hecho de estar más delgada… Odié a cada persona que se fijaba en que ya no tenía lorza pero no en que mis ojeras me daban la vuelta a la cabeza.

    Me costó mucho convencer a mi médico para que me mandara a un especialista (el cual flipó con la actitud de mi médico a pesar de que todo indicaba que algo no iba bien) y ahora me está costando mucho convencer a la gente que ahora me ve con unos kilos de más de que no es que haya dejado la dieta, es que ahora estoy bien. (Aunque realmente esta es la parte que menos me importa).

    Tan solo escribo esto a modo de denuncia porque es flipante como la gente (incluidos profesionales) en lo único que se fijan son en unos estándares de belleza marcados por vete tú a saber quien y no en la salud de las personas y sinceramente, me minan. Delgadas sí, ¿pero a qué precio? Por suerte, lo mío era un problema que con una dieta adaptada se solucionó pero, ¿Y si hubiese sido algo más grave? Pues no hubiese importado porque era la nueva versión delgada y mejorada de mi misma, aunque me quedaran dos telediarios, y eso, es triste.


    Responder
    Luna
    Invitado
    Luna on #57025

    Muchas veces he pensado de escribir y nunca lo he hecho, pero esto que dices me suena demasiado familiar como para no hacerle caso.

    Es verdad que solo se fijan en cómo estás por fuera, y que les da igual qué te pase (ya sean médicos, tus familiares o tus amigos). Al menos, te digo, te han llegado a decir que estabas mejor y lo que tenías no es nada grave.

    Yo nunca en mi vida he estado muy.. Rellenita, solo cuando tenía 17 o 18 años. He estado bastante obsesionada con todo eso de los estándares de belleza y no porque haya dejado de comer (esta vez, ya que me ha costado mucho dejar de hacer esas gilipolleces)… En un año peso unos 10kg menos y como más que nunca. Tengo tiroides. No engordo ni aunque me ponga a comer a todas horas y mal. Pero no me encuentro muy bien, estoy siempre nerviosa, no consigo descansar bien..
    Y obviamente nadie me ha dicho que estoy más guapa. Nadie sabe que estoy un poco enferma y todo el mundo se dedica a hacer observaciones sobre lo que como y lo que dejo de comer, que si tengo un problema con la alimentación.., e incluso me han llegado a decir que cada vez estoy más fea. Pero claro, luego si engordo, también se quejan.

    Así que.. No sé, es como que solo te tienes que preocupar tú de tu salud, y de hacer lo que quieras, pero quererte y verte bien, sin preocuparte por lo que pensarán o de si encajas o no encajas en sus moldes. Porque al final, lo que importa, eres tú, tu autoestima y tu salud.

    Responder
    Helena
    Invitado
    Helena on #57026

    Buenas

    He leído tu post y quería contar mi experiencia personal respecto a enfermedades y delgadez.

    Hace cosa de un año empecé a vomitar sin motivo aparente y la comida me sentaba fatal, fui al médico y me diagnosticaron una hernia de hiato como un balón. A cuenta de dicha hernia, he perdido unos 10 kilos y ahora me paso el día con hambre y sin poder comer muchas cosas que me encantaban.

    Comer chocolate o tomar café es sinónimo de vomitar y hace que me encuentre mal de la hernia unos dos o tres días. Tengo que comer cantidades muy pequeñas y he tenido que olvidarme de los fritos, los cítricos y el TOMATE, con lo que yo amaba el salmorejo y el gazpacho.
    A mí me encanta hacer deporte y he ido viendo como mi masa muscular se iba yendo por no poder comer para mantenerla, en cuanto intento entrenar más duro, empiezo a adelgazar y a perder peso…

    Vamos, para mí es un calvario. Pero tengo que escuchar a gente que dice «qué suerte, ojalá tuviera algo así para estar delgada», «estás mucho mejor más delgada, antes estabas más musculosa», «¿has adelgazado? ¡Qué guapa estás, qué bien»…

    Les regalaba mi hernia con gusto a quien la quisiera, ya verían si de verdad esos 10 kilos menos compensan no poder comer un brownie sin tener ardores y reflujos durante dos días.

    Responder
    summer
    Invitado
    summer on #57035

    Lo que tienes es hipertiroidismo y es una enfermedad preocupante- Claro que se baja de peso, en forma drastica en algunos casos, pero en otros no. Lo malo es todos los otros sintomas y enfermedades que trae. La gente solo se fija en como te ves, todo iba bien hasta queme saque una foto, y me asuste, 10 años mas, mil arrugas mas, y no decir lo mal que me sentia siempre. Fui al medico, pastillas van y vienen, pero esta enfermedad no abandona, solo puede llegar a cambiar por hipotiroidismo, que te hace engordar de nuevo. Y ahi comienza todo el proceso de hacer entender a otros el porque subiste de peso si antes estabas tan bien. Al final, me canse de dar explicaciones. LLegue a escuchar que alguien preferia tener esta enfermedad, y estar flaca, que estar sana pero mas rellena. Estupideces creadas.

    Responder
    Marina
    Invitado
    Marina on #57036

    Me identifico totalmente. Siempre he sido «grandota», alrededor de los 70 kilos, midiendo 1,68. Ahora escrito me parece un poco ridículo pero toda la vida he sido la gordita del grupo, la niña más grande y que sobresalía de las demás, y así me sentía. Toda la vida he estado obsesionada con que todo sería mejor para mí, si bajara esos 10 kilos que me diferenciaban del resto de amigas. Kilo arriba y kilo abajo, nunca conseguía llegar a ser como ellas y me sentía una persona mediocre, como si siempre fuese a haber alguien mejor que yo. En la universidad empecé a hacer deporte y, por estrés y demás cosas, empecé a comer un poco mejor. Perdí algo de peso y me sentía genial. Me esforcé, reduje un poco más las comidas, incrementé la rutina de ejercicios… La báscula seguía bajando. Ya podía ponerme ropa de la que usaban mis compañeras. En un momento dado salí de viaje a pasar una temporada en el extranjero. Tenía miedo de no poder controlar la situación, de los excesos que se suelen producir en este tipo de viajes, así que extremé las medidas al máximo. 2 meses después, nada de mi ropa me valía, no tenía la regla, me dolía el cuerpo a todas horas y no me perdonaba salirme de mi dieta, ni no tener tiempo para salir a correr. Como estaba fuera, empezaron a llegarme mensajes de lo guapísima que estaba en las fotos, de lo bien que me veían. Volví a casa y la situación no cambió. Literalmente no podía comerme ni medio plato de los que me ponía mi madre. Me levantaba antes para poder hacer mis ejercicios antes de irme a la universidad. Fui al médico y me dijeron lo que todos en mi familia se esperaban: anorexia nerviosa. Me dieron unas pautas a seguir para ir llevándolo desde casa, pero me podían los nervios, lloraba delante de cada plato y encontraba cualquier excusa para largarme de casa sin comer. En clase, muchos se sorprendieron del cambio que había dado durante el verano, otros me felicitaron: había perdido, como mínimo, 20 kilos. Nadie comentó nada de mi pelo, apagado y sin brillo, ni de que me pasara el día bebiendo infusiones. Pasaron dos meses más y finalmente me dieron la noticia de que tenía que ingresar en el hospital. Era fecha de exámenes y entrega de trabajos en grupo, así que tuve que hablar del tema con algunas personas. «¡Tú ni caso, estás estupenda!». En aquel entonces odié lo que me dijo mi madre sobre este comentario: quien te ha dicho eso, no te quiere, ni te conoce.
    En resumen: este artículo es real como la vida misma, por mucho que duela y por muy absurdo que parezca.
    Ahora veo que ninguna de las felicitaciones eran de personas a las que pueda llamar » amigos» y que es verdad que no saben nada de mí.
    Por favor, un poco más de sentido común… «Donde hay salud, hay belleza» y eso es indiscutible.
    Gracias por compartir tu historia.

    Responder
    Eva
    Invitado
    Eva on #57039

    Uuf,yo he pasado por hipertiroidismo, 5 años. Y es verdad, todos me decían que estaba mas guapa por haber perdido kilos (estaba embarazada cuando me lo diagnosticaron y tuve un embarazo malísimo) Pero nadie veía mis ojeras, ni mi cuello cada vez mas hinchado, ni mis temblores casi continuos, ni mis ataques de ansiedad o taquicardias incluso durmiendo, ni que me llevaba todo el día con hambre pero empezaba a comer y se me cerraba el estómago, y que contra mas comía más adelgazaba porque mas rápido quemquemaba la tiroides lo poco que iba «pa’dentro» Ni tampoco me vieron llorar porque me veía las costillas en el reflejo del espejo y porque mi cara cada estaba mas consumida (llegue a pesar 45 kilos) Hace dos años me hicieron lo del yodo radioactivo y ahora tengo hipotiroidismo, así que sigo enferma pero de otra manera, y os juro que hay gente que ahora ni me mira a la cara, o me miran con lastima o ironía por haber engordado y que me cueste el llble de lo normal adelgazar… Así que haz todo lo posible por estar sana, y cada vez que te digan que estas mas guapa,mandalos a paseo, que no te afecte ni te indigne, que de ti solo sabes tú y punto.

    Responder
    bety
    Invitado
    bety on #57075

    A mi me pasa al revés, tengo hipotiroidismo y en un año engorde casi 10 kg. Fui al endocrino y me mandó a un dietista muy duro que me negó en seis meses cualquier tipo de hidratos de carbono. Imaginad mi mal humor, mi ansiedad, irritable por no poder comer lo mismo y cambiar las cañas por cola light. Aún así sólo he adelgazado 5 kg y me dije que ya estaba bien y que no quería dietas tan estrictas y que dada mi enfermedad, cada vez eran más bestias.
    La gente, por supuesto, reparó en mi figura diciéndome que debía hacer deporte, moverme más, seguir la dieta a rajatabla porque era evidente que estaba gorda y que cada vez tenía más cara de pan de kilo. Un horror.
    Lo.peor de todo es q hay mucha gente que cree que es una excusa y que en realidad me hincho a donuts y q si estoy gorda, es porque algo hago mal… ¿quizás es q estoy enferma de hipotiroidismo o es que es un invento de los gorfos? Lo dicho, horror.

    Responder
    Cloe
    Invitado
    Cloe on #57119

    Lo triste de todo esto, estés gorda, delgada, alta o baja, es que todo el mundo tenga que opinar sobre el cuerpo de las mujeres como si se tratasen de simples objetos que están ahí para agradar la vista a los demás. Lo importante es ser feliz y que esa felicidad te dibuje una sonrisa en tu cara todos los días. Tengas el tamaño que tengas. Salud

    Responder
    Ana Ruiz
    Miembro
    Ana Ruiz on #57281

    Para flipar con muchos profesionales. Si eres gorda no eres nada. Ole…

    Responder
    Anäis
    Invitado
    Anäis on #57282

    Yo soy hipotiroidea, y actualmente tengo un sobrepeso de casi 40 kg con respecto a lo que sería una chica de mi talla normal (1’63). Soy consciente y lo digo de antemano que debo bajar de peso, no sólo por verte más guapa o por autoestima que es importante, sino por salud y mejorar mi calidad de vida, he visto cómo sin darme cuenta tengo problemas para atarme los zapatos o simplemente ponérmelos en una zapateria, lo paso mal.
    La obesidad en mi caso ha sido -como ya he comentado en otro lado- en un buen cacho emocional, otro buen cacho por factores genéticos (he salido a mi padre que bajito y está obeso también y mi abuelo también) y otro tanto, la dichosa tiroides.
    Llegó sin darme cuenta, y el colmo fue cuando en 2014 me operaron de un amago de peritonitis y tuve que estar unos 2 meses en cama sin poder moverme apenas donde cogí casi 15kg desde ese año para acá al hacer (forzosamente) de mi convalecencia una vida sedentaria que no quería.

    Esto sería normal si no fuera porque estoy operada de banda gástrica por una clínica privada (me reservo el nombre por seguridad), me operaron en 2013, tras 6 meses con un balón de esos gástricos que te hinchan para que ocupe volumen y comas menos. Bajé solo 5 kg.
    Me operaron, tuve la banda gástrica, perdí 16 kg… Todo iba bien, los pagos mensuales y eso, cuando por la crisis fuimos perdiendo empleos por los recortes, a mi padre lo despidieron, detrás fui yo… no pudimos pagar las facturas y lo que debía de ayudarme se me convirtió en un martirio porque me afectó emocionalmente. Comenzaron los acosos telefónicos de los cobradores de morosos, me sumí en una depresión que alteró mis hormonas hasta aumentar aún si cabe mi hipotiroidismo y asi estoy a dia de hoy, con una deuda de 10.000 euros, una banda gástrica que no me puedo quitar y no me ha hecho nada, UNA ESTAFA, UNA ENGAÑIFA que me trae por la calle de la amargura.

    Las clínicas estas de belleza y adelgazamiento saben cómo vender un buen marketing a la sociedad de como que están haciendo un «bien social» fomentando hábitos saludables cuando en realidad son un SACA-DINEROS de nuestra desesperación ya por querer bajar de peso o al menos intentar ser saludables. Son estas clínicas las que fomentan también un ideal FALSO de belleza y unos ‘cánones de mierda’ que mucha gente, como en nuestro caso, desesperada, intenta solucionar. Son puro marketing para el que cuentan con el ‘gancho’ de programas de famosas y otros como ‘Cambiame’. Son gentuza que han hecho de la desesperanza un negocio. Yo estuve genial mientras pagué, tenía psicóloga y todo, claro si tienes dinero «Poderoso Caballero», te abanicamos y te ponemos alfombra roja… pero al no poder por las consecuencias de nuestros despidos el mundo se me vino encima: ahí me tiraron, como un perro. Y con una deuda de miles de euros que no podré pagar -estoy en el paro, como muchos españoles que están hasta el cuello por situaciones similares.

    Hay quien leyéndome me pregunte ahora: ¿Por qué te metiste? O ¡eso de la banda gastrica es de gente pija! – Vale sí… no era de esa gente que vivía por encima de sus posibilidades, de hecho vivimos en un barrio obrero, nunca hemos sido de viajar y no usamos coche, sino el bus.
    Intenté bajar de peso porque era la salud y el rechazo que he sufrido en muchas entrevistas de trabajo por mi físico. Porque me han insultado.. Hubo muchas causas emocionales. «¿Por qué me metí?» Eso ahora me pregunto yo. Ahora anímica, monetaria y fisiológicamente estoy mucho peor que cuando me operaron de banda gástrica. Y con esta mierda de aparato dentro de mí que no me ha hecho nada… Para que me lo quitasen deberían operarme de nuevo y más cicatrices. :( Ademas de desembolsar 2000 euracos a esa gentuza.

    No sé si alguna está por operarse de banda gástrica o está operada, pero dejo mi testimonio como aviso de que no os pase a ningun@ lo que a mí, chic@s. Son de esas experiencias que te consumen viva y te minan la autoestima hasta roerte viva.

    Ayer se burlaron de mi de una manera muy cruel, -no me repito pero podéis leer mi post ‘Sobrepeso y Humillación’ al respecto. Si estás ya ‘minada’ ni os cuento cuando eres victima de gentuza que ni conoces y de sus insultos ‘gordofóbicos’.

    Estoy muy contenta de que aparecíera el libro que habéis sacado porque me he reído mucho con él, me sentía representada en cada línea, me veía a mi misma. Me ha servido para conocerme y valorarme más. Yo debo empezar de cero y me he sentido desorientada, aquí te dan muchas pautas para ser feliz contigo misma, esa es la palabra. Me gusta mucho su diseño y su tacto. Me lo han prestado y lo estoy leyendo estos días y me encanta!

    Tenemos que luchar y unirnos, porque somos personas no una plastilina a la que la sociedad moldea. Merecemos respeto, comprensión, tolerancia.
    Un abrazo muy fuerte y gracias por leerme hasta aquí y por vuestra paciencia.
    Anäis

    Responder
WeLoversize no se hace responsable de las opiniones vertidas en esta web por colaboradores y usuarios del foro.
Las imágenes utilizadas para ilustrar los temas del foro pertenecen a un banco de fotos de pago y en ningún caso corresponden a los protagonistas de las historias.

Viendo 10 entradas - de la 1 a la 10 (de un total de 10)
Respuesta a: ¿A qué precio?
Tu información: