Navegando por las entrañas de internet un día cualquiera de esta eterna cuarentena, descubrí  un artículo donde una Coach experta en relaciones de pareja, amor y autoestima hablaba de como deberías comportarte cuando regresara ese ex desaparecido sin razón o aquella persona con la que hablabas y te hizo ghosting, o como ella los llamaba : «los houdinis«.

Normalmente, estos vuelven mediante mensajes de texto. (Spoiler – algo que creo que no nos pilla desprevenidas ya). Ella explica que cuando esto pasa, la mayoría de las personas no sabemos como reaccionar y que nuestro comportamiento al gestionar nuestras respuestas desvelan nervios o urgencia de volver con ellos.

Por regla general, nos sueltan un «hola! Qué tal?» O los que son más entusiastas un «hola, guapísima«. Y ¿qué es lo que solemos hacer cuando vemos ese mensaje que habíamos esperado tanto hace algún tiempo atrás? Contestar un «hola, bien, y tú?» pasados cinco minutos desde que recibimos su mensaje. ERROR!!! La coach recomienda no abrir el mensaje inmediatamente. ¿Por qué? Pues porque lo que generas al no contestar al segundo, es una sensación de expectativa ya que seguramente esta persona estaba acostumbrada a recibir tu respuesta en un abrir y cerrar de ojos. En esta ocasión lo vas a dejar esperando un buen rato. Que cada vez que revise si leíste el mensaje, vea que aún no te dio por abrirlo.

Un par de horas después, como mínimo, lo abres y lo dejas en visto por otro rato. Otra vez… ¿ por qué? Pues la respuesta que debes darte a ti misma es la siguiente: que no se te olvide que desapareció sin motivo aparente y tú  lo pasaste mal. Es decir, no se merece una respuesta instantánea si es que la última vez tú ni siquiera recibiste una. Así  que si le interesa, esperará. Recréate un poquito en ese poder que te da ahora a ti el haberlo dejado con el doble tick azul. En este caso, le empiezan a entrar por su cabecita una serie de preguntas que le van generando menos seguridad en sí mismo. Deja que se imagine las respuestas. Tú podrías estar haciendo mil cosas distintas y no parar tu mundo para contestar a un mensaje. Que sienta un poco de lo que tu sentías al no recibir una respuesta de su parte. Que vez que no es una sensación placentera. Le sirve para valorar u  poco la situación. La pelota también puede estar en tu tejado.

Una vez que ya ha pasado un periodo de tiempo aceptable, una hora con todos sus minutos, contesta con un simple emoticono. El que quieras. Esa va a ser tu única respuesta. Porque si resulta que este personaje está apareciendo ahora después de haberse ido sin dar explicaciones, lo menos que puede hacer es ser un poco ingenioso y tirar de la conversación. Un «hola» no nos sirve, chicas. Y recordad que a veces solo hablan por hablar, por aburrimiento o por otras cosas (inserta aquí la que se te ocurra, hay miles) y no precisamente porque de verdad te extrañen. Es decir, si quiere reaparecer, que le eche ganas. Pidamos iniciativa y acción.

Una vez que haces eso de mandarle cualquier emoticono como respuesta, pueden pasar dos cosas: a) no escribe más (y demos gracias porque así nos ahorramos sacarlo de su aburrimiento. B) nos preguntan algo súper «original» «qué  tal? Qué has estado haciendo?» O algo por el estilo.

Cuando recibamos este tipo de preguntas NO respondas «bien, y tú?» Porque es lo que espera. Que respondamos con algo básico para que desde ahí la charla fluya. Pónselo un peldaño más difícil. Contéstale algo inesperado e ingenioso y de preferencia que sea una broma (esto también lo dejamos a tu elección). Lo que importa es exactamente esto, que sea una broma para que le cueste trabajo seguir la conversación.  Que tu veas que pone empeño en seguir hablando contigo. Hazle pensar. También queda prohibido poner un «JAJAJA» después de la broma, eso le quita un poco de poder a sus ojos en tu forma de comunicarte. Recuerda, en esta conversacion vas a ser ingeniosa, él va a saber que es una broma pero no vas a ir a hacerle reír. Simplemente estás sentando una base. Debe darse cuenta mediante tus respuestas que tú llevas la voz cantante.

Una vez que respondas con tu broma, espera. No digas nada más. Esto lo incomodará. Saber que no está recibiendo las respuestas normales le va a generar cierta incertidumbre y lo saca de su zona de confort. Al ver esto, ésta persona va a ver qué actitud tomar. Es decir, si se va a hacer el simpático,  si se va a lanzar a pedirte una cita, lo que sea que se le ocurra tendrá  que venir de él.  No tienes por qué facilitarle la vida. No estás siendo grosera, de hecho. Estás siendo receptiva al contestarle e incluso bromista ¿no? Que haga un esfuerzo y te diga a qué viene, pero recuerda, si la conversación  se estanca, no te corresponde a ti sacarlo del apuro. El fue el que se fue sin ser echado y el ha sido el que ha vuelto sin ser llamado.

Otro detalle en este tipo de conversaciones es que preguntan si estás ocupada (ya que no estas contestando al segundo, como antes hacías). Respóndele que NO. Que le quede claro que si no estás siendo como el esperaba quizás por falta de interés, porque estés molesta, etc… eso le corresponde imaginárselo a él.  Cuando te escriba el tipico «a ver cuando nos vemos«…si quieres y me refiero a REALMENTE QUIERES porque te sigue gustando, contéstale con un vago «si, estaría bien» (lo que sea que quieras contestarle en esta linea), no le digas cuándo o dónde porque volvemos a lo mismo...el esfuerzo que lo haga él. En este caso de la vuelta inesperada de tu houdini personal, no seas tú la que se arriesgue a proponerle un plan ya que aún no sabemos con qué meta ha vuelto.

Ante todo métele un poco de humor sarcástico a tus respuestas. Les hace pensar un poquito y sea cual sea el resultado te empoderas un poco. Algunos solo vuelven para ver si aún tienen algo de poder sobre ti.

En definitiva, se trata de no ser predecible ya que no deberías preocuparte de hacerlo sentir cómodo después de haber desaparecido sin razón aparente y sin explicación alguna.

En fin, esta es la técnica que recomienda esta coach si es que aún quieres recuperar el interés de aquella persona que tanto te gustaba y desapareció sin más pero en mi opinión te diré, y esto lo he aprendido a base de escarmientos, que si alguien te hace ghosting de esta manera, y te deja en la estacada cuando menos lo esperabas, ni siquiera merece que mantengas una estrategia. Recuerda que eres muy válida y hay cientos de personas en este mundo que pueden ser más afines contigo que aquel personaje que no te dio el valor necesario en su día.

Pienso que es raro que una persona así sea de fiar pero también es cierto que los humanos nos equivocamos y hacemos muchas tonterías de las que a veces nos arrepentimos seriamente.

Y vosotras qué ¿sois de las que aplicais alguna técnica en el caso de que vuelvan esos ex? ¿Habíais hecho esta alguna vez o simplemente os dejáis llevar por lo que os dice la experiencia y la intuición?

 

¡¡Os leemos!!