
Si tuviera que compararlo con algo, sería que metieron un tubo de metal con toda la fuerza posible en mis genitales: dolió como la m#erda.
Por LoversizersY yo juro no olvidarlo, porque aunque no tuve el parto que yo deseaba, esa inmensa herida me ayudó a traer a mi hija al mundo sana y salva.
Por Alba PoloLa gimnasia abdominal hipopresiva salvó mi vida y mi potorro.
Por LoversizersSomos MADRES con todas las letras, y esto no nos lo puede quitar nadie.
Por Alba PoloHoy vengo a recordar a todas las heroínas anónimas que han pasado por una cesárea, las grandes olvidadas de la maternidad.
Por analactea