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¡Hola, preciosa!
Llegado este punto, aunque hagas ejercicio y tengas unos hábitos saludables, el problema va a seguir…porque no es cuestión de la comida o el ejercicio (podrías perder todo el peso del mundo y seguir sintiéndote igual). Intenta buscar ayuda psicológica para que puedan ayudarte de la mejor manera posible. Cuando empieces a encontrarte un poco mejor, todos los miedos e inseguridades con el trabajo irán disminuyendo también.Muchísimo ánimo :)
ResponderResponder¡Hola, preciosa!
Me ha dolido leerte, siento mucho por lo que estás pasando.
Ni es una chorrada ni has hecho nada malo, ¡no tienes que perdonarte por nada!Me parece muy grave la forma de actuar de tu novio. No solo no entiende lo que te ocurre (a nivel fisiológico) sino que no se pone en tu lugar, ni respeta tus límites. Y esto no es una cosa puntual, lo hace siempre (por mucho perdón que pida).
Por favor, deja esa relación cuanto antes. Te está haciendo daño a nivel físico y emocional. Léete y piensa que le dirías a una amiga si te contara lo que nos has escrito.
Vales mucho como persona y te mereces a alguien que te quiera, te cuide y te entienda porque no, no siempre, tenemos ganas de mantener relaciones sexuales ¡y no pasa nada! (independientemente del motivo).
Hay hombres maravillosos en el mundo, pero esta persona, por desgracia, no lo es. Te hace daño y NO TE LO MERECES.No estás sola.
Tu comunidad seguirá aquí leyéndote y ayudándote en todo lo que pueda.
¡Mucho ánimo!Responder¡Hola, Tere!
Muchas veces la época de exámenes (y otras situaciones de estrés) sacan todos los miedos, inseguridades y pensamientos negativos que acumulamos diariamente.
Quizá has dado mucha importancia a sacar la carrera con unas determinadas notas y el nivel de perfeccionismo tan alto, al ver que no llegabas, te ha hecho sentirte tan mal y con tantos nervios.
Tu valor como persona no está en la calificación que saques ¡eres mucho más que eso!
Trata de ponerte metas realistas y si, al final, suspendes el examen, ¡no se acaba el mundo! intenta prepararlo en la segunda convocatoria.
Me alegro de que decidieras dejar el TFG si eso era algo que tú necesitabas. Sigue escuchándote, haciendo caso a tu cuerpo, ¿que te pide? si te pide un poquito de pausa, de frenar, de bajar el ritmo, intenta hacerlo.¡Mucho ánimo!
Responder¡Hola, Paula!
Lamento que te sientas así, entiendo que es muy duro.
También me da pena que hayas iniciado terapia en varias ocasiones y sientas que no terminaban de dar en el clavo, a veces pasa, no todos los terapeutas encajamos con todas las personas.
Te diría que intentes dar una oportunidad más a la Psicología. Creo que cuando consigas dar con la persona idónea irás viendo progresos.
Efectivamente, lo que te dicen de «racionalizar» es una forma de hacer frente a todos esos pensamientos que te generan inseguridad, pero al final necesitas a alguien que te acompañe en el camino, sobre todo, si te decides a profundizar en la infancia.
Por si te sirve, te lo voy a decir e intenta repetírtelo porque es verdad: te mereces las cosas que tienes, eres suficiente y vales mucho.
Cuando te vuelvan todos los pensamientos que comentas trata de decir «para» porque te estás lanzando mensajes muy hirientes a ti misma. Y aunque no te resulte fácil, intenta decirte algo bonito para contrarrestar.¡Mucho ánimo!
Responder¡Hola preciosa!
Que situación tan dura te ha tocado, por desgracia, vivir.
Creo que, por todo lo que cuentas, te podría venir muy bien acudir a terapia psicológica con algún profesional especializado en el tema, que te ayude a entender todo lo que ocurrió. Es totalmente normal que el cerebro «borre» recuerdos y situaciones tan traumáticas.
Y no, para nada estás loca ni nada similar. Los abusos en la infancia, se recuerden o no, dejan huella, hacen mucho daño y las consecuencias muchas veces se ven siendo adultos, cuando somos más conscientes de qué es «normal» y qué no.¡Muchísimo ánimo!
ResponderBuenos días :)
¿Por qué zona estás buscando o te vendría mejor?
Yo paso consulta en Madrid centroResponder¡Hola, bonita!
Lo primero decirte que entiendo cómo te sientes, es muy duro y muy difícil ver como nuestras hermanas están sufriendo, ¡cuanta impotencia!
La situación que comentas de tu hermana tiene que estar siendo muy dura. Las autolesiones no son tonterías, ni cosas de niños, ni llamadas de atención. A veces, no encontramos una forma mejor de regular todo el malestar que sentimos y aunque evidentemente no es la mejor forma de hacerlo, por desgracia, tampoco es una conducta rara en los adolescentes.
Tu hermana necesita ayuda profesional. Tus padres, independientemente de su situación de divorcio, tienen que buscar el bienestar máximo de sus hijas y eso pasa por hacer una pausa en la «guerra» y centrarse en proporcionarle ayuda psicológica a tu hermana.
Que hablen con el centro escolar: ¿qué dice el/la orientador/a? ¿pueden proporcionar ayuda desde el centro? ¿son conscientes de la situación de acoso?
Si no es así, es importante que el centro conozca lo que está ocurriendo y tome medidas efectivas.
Y hay que buscarle un psicólogo con el que tu hermana encaje, porque evidentemente su nivel de malestar está siendo ya muy elevado.
Por tu parte, podrías intentar hablar con ella y mostrarle tu apoyo, que sepa que estás ahí si te necesita, que no se sienta sola.¡Muchísimo ánimo!
Responder¡Hola, Be!
A las personas muy sensibles nos suele ocurrir que vivimos en una pequeña montaña rusa de emociones y cuando las circunstancias de la vida son más «normales» no terminamos de encontrarnos porque no estamos acostumbradas.
Piensa si puede ser más esto que te comento (está todo más estable, yo me encuentro más estable también) o si la apatía que comentas te interfiere en tu día a día: ¿tienes ganas de hacer los mismos planes que hacías antes? ¿estás muy cansada sin motivo aparente? ¿te cuesta seguir tu rutina habitual?
A veces, simplemente no pasa nada y entonces nos encontramos «neutras», pero si ves que la apatía y la desgana se incrementan, intenta buscar ayuda psicológica.Un abrazo! :)
Responder¡Hola!
Las rupturas de pareja son momentos dolorosos, al final tenemos que hacer un duelo por esa «perdida» y lleva un tiempo.
Es normal que estés triste y tengas añoranza de las cosas positivas de la relación, pero tú misma reconoces que el trato quizá no era el mejor y de ahí la ruptura.
Intenta darte un poquito más de tiempo, busca planes que te apetezca hacer con amigos/as, contigo misma…descubre cosas nuevas.
Si ves que siguen los meses y te sigues sintiendo «enganchada» a esa tristeza y demás, intenta pedir ayuda psicológica.Un abrazo! :)
Responder¡Hola, preciosa!
Después de leerte no tengo ninguna duda de mi respuesta: Sí, ve a terapia. Porque te va a ayudar mucho.
Tienes derecho a cuidar tu salud mental, independientemente de que haya personas con otras circunstancias. Las tuyas son mucho más que suficientes, no infravalores tu sufrimiento porque tiene que estar siendo muy duro.
Has pasado por situaciones realmente muy difíciles y a edades muy tempranas. Esto hace que como adultos tengamos heridas que hay que sanar para que dejen de doler.
Ya sea por la vía pública o privada, espero que encuentres un terapeuta con quien encajes y puedas abrirte para ir cerrando todas esas heridas.
¡Muchísimo ánimo!