
Todas recordaremos anécdotas a lo largo de nuestra vida. En mi caso, no se me olvidará el día en el que el perfume me arruinó un buen sexo.
Por Patricia Sevillano«Lo has gozado, ¿eh? ¿cuántas veces te has corrido?»
Por LoversizersPasamos 10 minutos llenos de mentol y grasa de la crema, en bolas y yo abanicando con la fuerza de una pecadora en la misa de domingo.
Por LoversizersEn un principio, no estuve muy por la labor de quitarme la parte de abajo del bikini por si aparecía gente y teníamos que disimular.
Por LoversizersY ahí estaba yo con mi novio el pobrecico más blanco que la teta de una monja, haciéndome señas, que yo pensaba que le estaba dando un Ictus al condenado.
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